Hussein de Jordania acusa a Occidente de buscar en el Golfo el control del petróleo

El rey Hussein de Jordania denunció ayer la aplicación de un doble rasero en el tratamiento del problema palestino y la crisis del golfo Pérsico y criticó el incremento de unidades militares norteamericanas en la región. En su discurso de apertura del Parlamento, Hussein insistió en una solución árabe del conflicto y acusó a Occidente de buscar en el Golfo el control de sus recursos petrolíferos más que la defensa de unos principios. El secretario de Estado norteamericano, James Baker, pidió ayer a Etiopía, Costa de Marfily Zaire -miembros del Consejo de Seguridad- que apoyen una posible resol...

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El rey Hussein de Jordania denunció ayer la aplicación de un doble rasero en el tratamiento del problema palestino y la crisis del golfo Pérsico y criticó el incremento de unidades militares norteamericanas en la región. En su discurso de apertura del Parlamento, Hussein insistió en una solución árabe del conflicto y acusó a Occidente de buscar en el Golfo el control de sus recursos petrolíferos más que la defensa de unos principios. El secretario de Estado norteamericano, James Baker, pidió ayer a Etiopía, Costa de Marfily Zaire -miembros del Consejo de Seguridad- que apoyen una posible resolución de la ONU autorizando la guerra contra Irak.

La reacción occidental tras la matanza de 18 palestinos en la explanada de las mezquitas Al Aqsa y Omar, de Jerusalén, el 8 de octubre pasado, y su "tímida reprimenda" a Israel fue calificada por el monarca jordano como descarada y desvergonzada. El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución de condena de la actuación de las fuerzas de seguridad israelíes en el tercer lugar santo del islam y el envío de una delegación investigadora. Israel rechazó colaborar in situ con esa misión, por considerar que su presencia en la ciudad santa significaría una violación de la soberanía nacional.El rey Hussein de Jordania declaró que la tolerancia con el Gobierno israelí es habitual en las mismas naciones que promueven una escalada militar contra Irak y provocan el estrangulamiento económico de los países del área.

El reino hachemí anunció pérdidas económicas por valor de 1.500, millones de dólares en 1990 y hasta 4.000 millones el próximo año como consecuencia del embargo. Jordania es un país con la mayoría de sus tres millones de habitantes de origen palestina y simpatizantes de Sadam Husein, atrapado entre su dependencia del petróleo iraquí y su acatamiento a la ONU.

Según el jefe del Estado jordano, la respuesta de EE UU y varios países occidentales a los sucesos registrados en las mezquitas demuestra que "las verdaderas razones y objetivos" de la intervención extranjera en el Golfo no son restablecer la legitimidad perdida o defender principios sino "controlar nuestro destino y los recursos de las naciones árabes".

El rey Hussein, que tras un periodo de distanciamiento y desconfianza, mantiene buenas relaciones con el líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Yasir Arafat, y deteriorados vínculos con Arabia Saudí, imputó a Israel haber aprovechado la crisis del Golfo para favorecer la inmigración masiva de judíos soviéticos. Según Hussein, el objetivo de esta política es empujar hacia el río Jordán a los palestinos que residen en los territorios ocupados en la guerra de 1967, para crear "el Gran Israel".

Arabia Saudí

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En su intervención ante 80 diputados de la Cámara baja del Parlamento, en el que tienen una importante presencia los fundamentalistas islámicos -han conseguido la presidencia de esta instancia legislativa-, el soberano expresó su confianza en que las relaciones entre Anirnán y Riad mejorarán después de la ruptura observada entre estos dos países como consecuencia de la protesta saudí por la política contemporiz adora de Jordania, que se negó a condenar a Irak.[James Baker se reunió ayer en Ginebra con los ministros de Exteriores de Etiopía, Costa de Marfil y Zaire, a quienes pidió que sus países apoyen una posible resolución de la ONU autorizando la guerra contra Irak y obligar a Sadam Husein a retírarse de Kuwait, informa Reuter. El secretario de Estado norteamericano tiene previsto entrevistarse hoy en París con otros países miembros del Consejo de Seguridad, como parte de su ofensiva diplomática para obtener una resolución de la ONU que autorice el uso de la fuerza].

[El presidente de EE UU, George Bush, vetó ayer un proyecto de ley para combatir la proliferación de armas químicas y biológicas, por considerar que podría perjudicar la coalición multinacional contra Irak, informa Efe. Por otro lado, el secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar, se reunió ayer en Paris con un grupo internacional de economistas para estudiar la forma de paliar los efectos negativos que la crisis del Golfo provoca en los países pobres].

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