Una empresa cántabra fabrica uniformes militares para el desierto

La empresa Textil Santanderina, ubicada en Cabezón de la Sal (Cantabria), fabrica desde hace varias semanas tejido destinado a la confección de uniformes militares de características especiales para su utilización en el desierto, en cumplimiento de un encargo del Ministerio de Defensa, según fuentes industriales consultadas por EL PAÍS.El tejido que se utiliza para confeccionar los uniformes, fresco y ligero, recibe el nombre de mimetizado desierto y es similar al que emplean los soldados norteamericanos que han sido destinados al golfo Pérsico. La citada firma está considerada proveedo...

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La empresa Textil Santanderina, ubicada en Cabezón de la Sal (Cantabria), fabrica desde hace varias semanas tejido destinado a la confección de uniformes militares de características especiales para su utilización en el desierto, en cumplimiento de un encargo del Ministerio de Defensa, según fuentes industriales consultadas por EL PAÍS.El tejido que se utiliza para confeccionar los uniformes, fresco y ligero, recibe el nombre de mimetizado desierto y es similar al que emplean los soldados norteamericanos que han sido destinados al golfo Pérsico. La citada firma está considerada proveedora habitual del Ministerio de Defensa y del Ejército de Tierra.

Según la emisora de televisión Antena 3, el Ministerio de Defensa decidió, tras la invasión de Kuwait, encargar la fabricación de 20.000 uniformes especiales para combatir en el desierto. Aunque el Estado Mayor del Ejército realizó un estudio urgente sobre la confección de dicho uniforme, la premura de tiempo impidió realizar un diseño propio, por lo que se optó por copiar el de las tropas de EE UU.

No al envío de tropas

Fuentes militares y diplomáticas han descartado la posibilidad de que España mande tropas de Tierra al golfo Pérsico, al menos mientras no estalle un conflicto armado. Aún en ese caso, resultaría altamente improbable el envío de tropas terrestres, pues su operatividad resultaría muy reducida, dada la ya excesiva heterogeneidad de las tropas allí presentes y las dificultades con que tropieza la constitución de un mando conjunto. Además, una decisión de este tipo tendría que ser previamente consultada con el Parlamento, según la moción aprobada en su día por el Congreso con el apoyo del PSOE.No obstante, el Estado Mayor del Ejército de Tierra ha realizado, desde el inicio de la crisis, numerosos planes en torno a una hipotética intervención española, y ha adoptado diversas medidas en previsión de que el Gobierno cambie su actual criterio de limitar la participación militar al envío de tres buques.

El presupuesto del Ejército de Tierra para 1991 incluye una voluminosa partida para la compra de uniformes. Durante su reciente comparecencia en el Congreso, el jefe del Estado Mayor del Ejército, Ramón Porgueres, justificó el alto gasto en vestuario asegurando que el Ejército ha consuinido sus reservas y actualmente debe trasladar a toda prisa los uniformes que devuelven los reclutas al licenciarse para atender las necesidades de los nuevos llamamientos.

Portavoces del Ministerio de Defensa señalon ayer que carecían de datos sobre el encargo realizado a la citada empresa cántabra, por lo que no podían ofrecer una explicación. Un responsable de la firma dijo que no se está fabricando ningún tejido especial para el desierto, aunque admitió que el Ejército cambia con frecuencia los requisitos de sus pedidos y las características de las telas que encarga.

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