Polémica denuncia del presidente italiano sobre la lucha anti-Mafia

El asesinato en la ciudad italiana de Agrigento el viernes pasado del joven magistrado sicillano Rosario Livatino, que ocupaba uno de los puestos más arriesgados en la lucha contra la Mafia y que no contaba ni con escolta ni con coche blindado, ha llevado a afirmar al presidente de la República, Francesco Cossiga, que la criminalidad organizada se ha adueñado ya de parte del territorio nacional". Al mismo tiempo, Cossiga ha abierto una fuerte polémica con sus acusaciones contra los jesuitas de Palermo y el ex alcalde de dicha ciudad siciliana, el democristiano Leoluca Orlando, a quienes ac...

El asesinato en la ciudad italiana de Agrigento el viernes pasado del joven magistrado sicillano Rosario Livatino, que ocupaba uno de los puestos más arriesgados en la lucha contra la Mafia y que no contaba ni con escolta ni con coche blindado, ha llevado a afirmar al presidente de la República, Francesco Cossiga, que la criminalidad organizada se ha adueñado ya de parte del territorio nacional". Al mismo tiempo, Cossiga ha abierto una fuerte polémica con sus acusaciones contra los jesuitas de Palermo y el ex alcalde de dicha ciudad siciliana, el democristiano Leoluca Orlando, a quienes acusa de minar la unidad en la lucha contra la Mafia con sus posiciones radicales.Hace algunos días, Cossiga había recibido un documento preparado por la cumbre de la policía italiana acerca del dramático aumento de la criminalidad en este país.

La policía propone al presidente no sólo un aumento del presupuesto destinado a las fuerzas de seguridad, sino también la proclamación de una situación de emergencia política, como ocurrió en los años setenta contra el terrorismo, para que Gobierno y oposición actúen conjuntamente.

Cossiga acaba de lanzar un ataque contra el ex alcalde de Palermo, Leoluca Orlando, quien, como él, milita en la izquierda democristiana y que aspira a la secretaría del partido, y a los jesuitas de Palermo que le apoyan. El presidente ha llegado a decir que Orlando, a pesar de ser. "un joven bravo y honrado" no se ha dado cuenta "de cuánto daño ha hecho con sus intemperancias a la unidad de la lucha contra la Mafia".

Al mismo tiempo, Cossiga ha lanzado otra andanada contra los jesuitas del Centro Social de Palermo. Sin nombrar al responsable de aquel centro, el padre Ennio Pintacuda -quien, junto con Bartolomeo Sorge, es el gran inspirador de la política radical de Orlando, y por ello ambos se ven obligados a viajar en coche blindado y con escolta-" el presidente ha declarado a la prensa: "Quizá Orlando esté mal aconsejado por un sacerdote fanático que se cree que está en el Paraguay del año 1600".