Luis Alvarez no acudió al careo con el arquitecto que le denunció
El concejal del PP Luis Álvarez se escudó en el pleno municipal del día de ayer para no comparecer en el juzgado número 30 y asistir al careo con el arquitecto Campo Baeza. El letrado de Luis Álvarez tampoco se personó en el juzgado ni presentó excusa alguna por escrito. El juez Rafael Botella indicó que el careo se pospondría hasta septiembre, y que en la siguiente comparecencia se le comunicaría a Luis Álvarez que, en caso de no asistir, iría conducido por la fuerza pública.
El proceso judicial se inició a raíz de que el pasado 23 de abril el arquitecto Ignacio Vicens declarase pú...
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El concejal del PP Luis Álvarez se escudó en el pleno municipal del día de ayer para no comparecer en el juzgado número 30 y asistir al careo con el arquitecto Campo Baeza. El letrado de Luis Álvarez tampoco se personó en el juzgado ni presentó excusa alguna por escrito. El juez Rafael Botella indicó que el careo se pospondría hasta septiembre, y que en la siguiente comparecencia se le comunicaría a Luis Álvarez que, en caso de no asistir, iría conducido por la fuerza pública.
El proceso judicial se inició a raíz de que el pasado 23 de abril el arquitecto Ignacio Vicens declarase públicamente que en el Ayuntamiento había un concejal del PP que cobraba comisiones a los arquitectos a cambio de mantenerlos en la dirección de la obra. En una comparecencia ante el juez, Alberto Campo Baeza, arquitecto y amigo de Vicens, declaró que Luis Alvarez le había pedido el 30% de sus honorarios a cambio de mantenerlo en la dirección de una obra que realizaba en Vallecas, según declararon fuentes próximas al caso.
Campo Baeza tampoco se presentó al careo, aunque en este último caso existe la duda, no corroborada aún por el juez, de que el arquitecto no recibiese la notificación.
Los únicos que comparecieron ante el juez fueron los abogados de Vicens y del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM), Jesús Zarzalejos y Jaime Gil Robles. Si Luis Alvarez hubiera comparecido ayer al careo, habría obligado al Gobierno municipal de centroderecha a aprobar los 240 puntos del pleno, con el llamado voto de calidad del alcalde, que vale por dos. El CDS y el PP gobiernan con 28 concejales frente a los 27 con que cuentan IU y PSOE.