Alfonso Guerra afirma que lleva "demasiados años" dedicado a la política

El vicepresidente del Gobierno español, Alfonso Guerra, reiteró ayer en París su reciente afirmación de que lleva "demasiados años" dedicado a la política. Guerra precisó que con esa declaración no está expresando su intención de presentar su dimisión del Gobierno, sino tan sólo manifestando un sentimiento personal.

"Tengo ya medio siglo de vida y, si miro atrás, veo que llevo ya muchos años, demasiados años en la actividad política", dijo Guerra. "Y como todo el mundo sabe", prosiguió, "a mi todo lo relacionado con la cultura, el arte y la enseñanza me interesa tanto como la política"....

El vicepresidente del Gobierno español, Alfonso Guerra, reiteró ayer en París su reciente afirmación de que lleva "demasiados años" dedicado a la política. Guerra precisó que con esa declaración no está expresando su intención de presentar su dimisión del Gobierno, sino tan sólo manifestando un sentimiento personal.

"Tengo ya medio siglo de vida y, si miro atrás, veo que llevo ya muchos años, demasiados años en la actividad política", dijo Guerra. "Y como todo el mundo sabe", prosiguió, "a mi todo lo relacionado con la cultura, el arte y la enseñanza me interesa tanto como la política". El vicepresidente lamentó no poder dedicar todo el tiempo que desearía a sus actividades no políticas y expresó su deseo de que algún día pueda volver a hacerlo. "Dejé la enseñanza en 1976", dijo, "y me gustaría volver a ejercerla algun día".Guerra fue categórico a la hora de desmentir que esas declaraciones signifiquen su intención de abandonar sus labores en el Gobierno y en el PSOE. "Esa es una interpretación de la prensa, no la rnía", precisó. Para probar su tesis, Guerra proclamó que el próximo fin de semana estará de nuevo haciendo campaña electoral en Andalucía.

El vicepresidente del Gobierno y el primer ministro francés, Michel Rocard, presentaron ayer en París la edición francesa de la revista El socialismo del futuro, cuyo comité de dirección preside Alfonso Guerra. Horas antes, Guerra había almorzado con Pierre Mauroy, secretario general de los socialistas franceses.

Guerra y Mauroy consagraron buena parte de su conversación al problema de la inmigración procedente del Tercer Mundo. En opinión del socialista español, los conflictos causados por la presencia masiva de mano de obra extranjera no son tan graves en España como en Francia, aunque podrían llegar a serlo de no adoptar los países industrializados una política conjunta de ayuda al desarrollo del norte de África.