La mitad de los contribuyentes destino el 0,5% del IRPF a la Iglesia

Uno de cada dos españoles optó por destinar el 0,5% del IRPF a la Iglesia católica en el ejercicio de 1988 -que ayer se hizo público-, manifestó el director general de Asuntos Religiosos, Luis María Zavala.Según estos datos, los contribuyentes que destinan este porcentaje a la Iglesia han pasado del 35% del ejercicio de 1987 al 39,8% del siguiente año, exceptuando las comunidades de Navarra y el País Vasco, que mantienen el sistema de conciertos y recaudan ellas el impuesto. No obstante, el dinero recaudado por la Iglesia católica ha subido del 40% al 45%, ya que, según el director general, so...

Uno de cada dos españoles optó por destinar el 0,5% del IRPF a la Iglesia católica en el ejercicio de 1988 -que ayer se hizo público-, manifestó el director general de Asuntos Religiosos, Luis María Zavala.Según estos datos, los contribuyentes que destinan este porcentaje a la Iglesia han pasado del 35% del ejercicio de 1987 al 39,8% del siguiente año, exceptuando las comunidades de Navarra y el País Vasco, que mantienen el sistema de conciertos y recaudan ellas el impuesto. No obstante, el dinero recaudado por la Iglesia católica ha subido del 40% al 45%, ya que, según el director general, son las rentas más altas las que más se han decidido por poner la cruz en la casilla destinada a la Iglesia, que recaudó en dicho ejercicio 6.673 millones de pesetas. Esta cifra, unida a la recaudación de Navarra y del País Vasco, ascendería a algo más de 7.000 millones de pesetas, según Zavala, que supone la mitad del dinero que el Estado dará a la Iglesia católica este año, unos 15.000 millones de pesetas, hasta que ésta consiga su autofinanciación.

Una vez conocidos los datos referentes al ejercicio de 1988, la comisión mixta técnico-política Iglesia-Estado se reunirá este mismo mes para "hacer la traducción política de estos datos", afirmó Zavala.

Según los acuerdos Iglesia-Estado firmados en 1979, al tercer año de aplicarse el porcentaje del IRPF, que se empezó a utilizar en 1987, la Iglesia católica debe llegar a su autofinanciación, por lo que en el ejercicio de 1990, cuyos resultados no se conocerán hasta 1991, debería llegarse a esta situación.