Un pequeño cañon del Colorado

El río Duratón forma entre la villa de Sepúlveda y el embalse de Burgomillodo unas hoces que constituyen un auténtico, pequeño e ibérico cañón del Colorado, hendido en la corteza mesetaria de la provincia de Segovia.Sus cortados alcanzan los 100 metros de profundidad bajo la agreste paramera circundante.

En el fondo del cañón crecen espesos bosques de ribera, refugio posible de nutrias, zorros, tejones, pequeños mamíferos.

Las aves de roquedo, como los buitres leonados (con más de 230 parejas censadas), el halcón peregrino, el búho real o el alimoche, plantan sus nidos en el espe...

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El río Duratón forma entre la villa de Sepúlveda y el embalse de Burgomillodo unas hoces que constituyen un auténtico, pequeño e ibérico cañón del Colorado, hendido en la corteza mesetaria de la provincia de Segovia.Sus cortados alcanzan los 100 metros de profundidad bajo la agreste paramera circundante.

En el fondo del cañón crecen espesos bosques de ribera, refugio posible de nutrias, zorros, tejones, pequeños mamíferos.

Las aves de roquedo, como los buitres leonados (con más de 230 parejas censadas), el halcón peregrino, el búho real o el alimoche, plantan sus nidos en el espectacular entorno geológico vertical, y sobreviven allí raras especies botánicas.

Y en el corazón del parque natural, colgado sobre un meandro fluvial, surge además una secreta construcción románica, la ermita de San Frutos.

Más información

Otros restos arqueológicos y pinturas rupestres han sido hallados dispersos por el área. La llamada cueva de los Siete Altares, con sus atrios paleocristianos tallados en la roca, es citada por algunos autores como el más viejo templo segoviano.

Este conjunto de valores de fauna, geológicos, históricos, artísticos, es lo que hace del paraje de las Hoces del Duratón un espacio tan excepcional.

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