Acto de repudio a un disidente cubano
Hace días, Gustavo Arcos Bernes, dirigente del Comité Pro Derechos Humanos de Cuba, ha sido objeto de lo que en la terminología castrista se llama "un acto de repudio", es decir, una agresión en la que una turba organizada por la policía política lanza insultos o piedras, según las circunstancias, a una persona conocida por su oposición al régimen.Estos métodos ya fueron utilizados en los meses de abril y mayo de 1980 como parte de una campaña de intimidación contra los que pretendían abandonar el país. La opinión pública española debe expresar su protesta para evitar una repetición de los aco...
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Hace días, Gustavo Arcos Bernes, dirigente del Comité Pro Derechos Humanos de Cuba, ha sido objeto de lo que en la terminología castrista se llama "un acto de repudio", es decir, una agresión en la que una turba organizada por la policía política lanza insultos o piedras, según las circunstancias, a una persona conocida por su oposición al régimen.Estos métodos ya fueron utilizados en los meses de abril y mayo de 1980 como parte de una campaña de intimidación contra los que pretendían abandonar el país. La opinión pública española debe expresar su protesta para evitar una repetición de los acontecimientos de 1980.
Repetición que sería más sangrienta que la primera versión (que lo fue bastante), si nos guiamos por las últimas declaraciones de Fidel Castro, en las que prometía aumentar la represión contra los opositores a su régimen.