La CE estudia la revisión de los pactos de Lomé

La CE y los 66 países de África, el Caribe y el Pacífico (ACP) integradas en la Convención de Lomé iniciaron ayer en Bruselas la negociación para renovar el acuerdo que determina las ayudas privilegiadas que los doce conceden a la mayor parte de las que an día Meron sus colonias. Las ayudas financieras ocupan el ctntro de las discusiones. El Lomé IV, que entrará en vigor en 1990, aportará la inclusión de Namibia, Haití y la República Dominicana como nuevos miembros.

La conferencia interministerial CE-ACP comenzó ayer con el convencimiento de que el acuerdo será un hecho hoy, domingo...

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La CE y los 66 países de África, el Caribe y el Pacífico (ACP) integradas en la Convención de Lomé iniciaron ayer en Bruselas la negociación para renovar el acuerdo que determina las ayudas privilegiadas que los doce conceden a la mayor parte de las que an día Meron sus colonias. Las ayudas financieras ocupan el ctntro de las discusiones. El Lomé IV, que entrará en vigor en 1990, aportará la inclusión de Namibia, Haití y la República Dominicana como nuevos miembros.

La conferencia interministerial CE-ACP comenzó ayer con el convencimiento de que el acuerdo será un hecho hoy, domingo. Después de meses de conversaciones y del fracaso de la reunión de Luxemburgo, donde los países comunitarios se negaron a hacer nuevas concesiones comerciales, fuentes comunitarias señalaron ayer que "todo esta dicho".

Sólo faltan las decisiones políticas y acordar un punto ínternriedio sobre el presupuesto financiero para los próximos cinco años, separado entre los 8.500 millones de ECU de máximo que defiende el Reino Unido a los 15.500 millones de ECU (dos billones de pesetas) que reclama ACP "como mínimo.

El comisario español Manuel Marín, responsable de la política de desarrollo de la Comunidad, afirmaba ayer que "ésta es una buena ocasión para demostrar que la ayuda al Este no implica desinterés por la política tradicional de la CE para el desarrollo en el Tercer Mundo". Marín se ha volcado en la renovación del ajtual Acuerdo de Lomé III y defiende aumentar la ayuda financiera en un 70%.

Esta propuesta de pasar de 8.000 millones de ECU, incluidos los préstamos del Banco Europeo de Inversiones, a unos 1.2.000 millones de ECU (1,56 billones de pesetas) para los próxirrios cinco años no es en absoluto compartida por los Estados miembros. Francia e Italia están dispuestas a acercarse a esa cantidad, especialmente por sus compromisos políticos en África, que las hace también ser las principales beneficiarias en cuanto a los contratos obtenidos por sus erripresas en los proyectos financiados por la CE.

La presidencia francesa está además empeñada en sacar adelante el acuerdo, y para ello, segtín Marín, quizá tenga que poner dinero extra de su parte, pues si se quiere estar en la primera fila del concierto hay que pagar la entrada más cara". La RFA y Holanda son reticentes. España, que no se opone a incrementar las ayudas, pide para sí una reducción de su aportación individual del 6,6% al 5,5%.

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