El canciller federal de Austria, acusado de aceptar sobornos

El canciller federal de Austria, Franz Vranitzky, que hasta ayer mantenía su imagen de ser el último incorruptible, luego de la sucesión de escándalos que han obligado a renunciar a altos cargos de esta república alpina, se encuentra en dificil situación tras ser acusado de recibir indemnizaciones privilegiadas de 40 millones de pesetas, antes de presidir el Gobierno.El informe, que aparece en la edición de mañana del semanario Profil, agrega que Vranitzky acordó en un contrato especial firmado con su antigua empresa, el Landerbank, recibir una pensión de por vida al equivalente de dos millone...

El canciller federal de Austria, Franz Vranitzky, que hasta ayer mantenía su imagen de ser el último incorruptible, luego de la sucesión de escándalos que han obligado a renunciar a altos cargos de esta república alpina, se encuentra en dificil situación tras ser acusado de recibir indemnizaciones privilegiadas de 40 millones de pesetas, antes de presidir el Gobierno.El informe, que aparece en la edición de mañana del semanario Profil, agrega que Vranitzky acordó en un contrato especial firmado con su antigua empresa, el Landerbank, recibir una pensión de por vida al equivalente de dos millones de pesetas mensuales si abandona su función en el Gobierno. Las acusaciones están basadas en un informe preliminar realizado a esa entidad bancaria, donde trabajó el canciller federal hasta 1984.

El jefe del Gobierno, que más que un socialdemócrata es un tecnócrata y experto en finanzas, goza de popularidad no sólo entre el electorado, sino también en el interior de su partido, que lo reeligió el viernes como jefe del mismo. La votación, realizada durante el congreso de los socialdemócratas austríacos (SPO), que terminó ayer en Graz, dio un 99,42% de los votos para Vranitzky, a pesar de que ya se habían filtrado los rumores de los contratos privilegiados del canciller. Vranitzky dejó voluntariamente su puesto en el Landerbank, por lo que no le correspondía el pago de una indemnización. Recibió 15 meses después de tres años en el cargo y la ley específica que se reciba como máximo 13 meses después de 25 años de trabajo.

El canciller federal ha conservado la calma y la tranquilidad durante todo su Gobierno a pesar de las sucesivas crisis políticas de Austria, que empezaron desde las mentiras del presidente Kurt Waldheim sobre su pasado, hasta casos políticos criminales, que obligaron a renunciar a altos cargos del Gobierno. Sin embargo esta vez, cuando el escándalo le tocó personalmente, se mostró nervioso e irritado, lo que demostró con periodistas que intentaban obtener una versión directa. Según Vranitzky sus contratos son "legales y usuales" en una entidad bancaria.