Los animales domésticos también transmiten la salmonelosis

Las animales domésticos son agentes transmisores de la salmonelosis, según un informe presentado en la 42ª Asamblea Mundial de la Salud, celebrada en Ginebra. Ese estudio recoge que un 60% de las tortugas y un 30% de los gatos y perros, así como algunos pájaros, hacen la competencia a las gallinas, consideradas hasta ahora como el principal agente transmisor de la salmonella. Los últimos estudios han revelado también que esas aves transmiten la enfermedad tanto por la cáscara como por el interior del huevo

Esta última vía era desconocida hasta ahora. Todo apunta a que se trata de un nue...

Las animales domésticos son agentes transmisores de la salmonelosis, según un informe presentado en la 42ª Asamblea Mundial de la Salud, celebrada en Ginebra. Ese estudio recoge que un 60% de las tortugas y un 30% de los gatos y perros, así como algunos pájaros, hacen la competencia a las gallinas, consideradas hasta ahora como el principal agente transmisor de la salmonella. Los últimos estudios han revelado también que esas aves transmiten la enfermedad tanto por la cáscara como por el interior del huevo

Esta última vía era desconocida hasta ahora. Todo apunta a que se trata de un nuevo tipo de salmonella que, no se sabe por qué mecanismo, afecta no sólo a los huevos, sino incluso a los órganos de la gallina que los produce. Aunque el fenómeno ha adquirido mayor relevancia en Gran Bretaña, también se ha producido en Estados Unidos y otros países. Los huevos se consideraban hasta ahora vírgenes de salmonella, y aunque muchas veces eran su vehículo, se creía que la salmonella se introducía a través de la cáscara o en su manipulación. La revelación de esos datos sitúa la prevención de la salmonelosis en el campo veterinario más que en el médico, según Alberto Infante, responsable de relaciones internacionales de Sanidad que ha asistido a la 42ª asamblea mundial de la Organización Mundial de la Salud (OMS).Las conclusiones del informe aprobado por esta organización señalan que para erradicar la salmonelosis es necesaria una estrecha colaboración con la industria. En algunos países se están introduciendo bacterias específicas y antibióticos en los piensos con que se engorda a las gallinas. También se ha procedido a desinfectar los gallineros, pero este método se ha descartado por el riesgo que supone la comercialización de las aves irradiadas en el proceso de desinfección.