El peronista Menem, favorito en la eleccion presidencial argentina del domingo

Algo más de 20 millones de argentinos están convocados a las urnas para las elecciones presidenciales que se celebran el próximo domingo, en un ambiente enloquecido por las cifras de una economía que parece fuera de todo control. Casi todas las encuestas electorales dan el triunfo al candidato peronista, el gobernador de la provincia La Rioja Carlos Menem, abogado, de 58 años, aunque persiste la duda de si su victoria será suficiente y conseguirá los 301 electores necesarios para ser elegido presidente en el colegio electoral

Los peronistas lo tienen claro. En la carpeta que entregan a ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Algo más de 20 millones de argentinos están convocados a las urnas para las elecciones presidenciales que se celebran el próximo domingo, en un ambiente enloquecido por las cifras de una economía que parece fuera de todo control. Casi todas las encuestas electorales dan el triunfo al candidato peronista, el gobernador de la provincia La Rioja Carlos Menem, abogado, de 58 años, aunque persiste la duda de si su victoria será suficiente y conseguirá los 301 electores necesarios para ser elegido presidente en el colegio electoral

Los peronistas lo tienen claro. En la carpeta que entregan a los periodistas extranjeros en su centro de Prensa ya aparece programada para el lunes 15 la invitación a un asado con el "presidente electo". En el bando opuesto de la Unión Civica Radical (UCR) ya se masca la derrota. En privado, hasta los dirigentes radicales reconocen que no tienen nada que hacer. "Sólo nos podría salvar una enorme metedura de pata de Menem a última hora, pero esto parece imposible, porque parece que le cerraron la boca con cinta adhesiva", comentaron a este periódico.Parece como si todo se hubiese conjurado para hacer imposible el triunfo del candidato radical, el gobernador de Córdoba Eduardo Angeloz, abogado de 57 años. Las cotizaciones del dólar y las tasas de interés en el microcentro de Buenos Aires han convertido la economía en una especie de ruleta de casino. La gente se amontona entorno a los centros de cambio y bancos. En las pantallas aparecen continuamente las subidas y descensos de la moneda. La llamada city porteña no está "al borde del ataque de nervios", como se repite continúamente parafraseando la película de Almodóvar, que se exhibe con gran éxito en Buenos Aires. La city está más allá del borde del ataque y ha entrado ya en la locura. Unos hablan solos y otros corren, como enloquecidos, de una acera a otra en busca de la mejor cotización. Todos especulan si es mejor colocar australes a plazo fijo, con un interés del 150% mensual, o comprar dólares. Desde la apertura de los mercados el lunes el tipo de cambio libre de la moneda de Estados Unidos subió de 85 a 115 australes por dólar. Esto significa que la moneda argentina, creada hace menos de cuatro años con el Plan Austral se ha devaluado ya por encima del 14.000%.

'Efecto dominó'

Todo esto tiene un inmediato efecto dominó sobre los precios, que suben incluso una y dos veces al día, en una carrera desenfrenada por la remarcación. Las emisoras de radio conectan varias veces cada hora con la city para dar la cotización del billete verde. El diario La Nación publica gráficos en primera página con la oscilación de la cotización del dólar, según la hora. Presuntos expertos aconsejan "esperar a primera hora de la tarde, porque a esa hora siempre sube". El índice del coste de la vida aumentó en abril más del 33%, pero esto no es nada ante lo que se avecina. Los precios de mayoristas batieron en abril todas las marcas, con una subida del 58%, la mayor desde que se creo este índice. Esto repercutirá en los precios minoristas este mes, que pueden dispararse hacia la hiperinflación.La estrategia de los peronistas ante esta situación caótica de la economía es esperar tranquilamente el día de la elección y presentar a Menem como la esperanza, un candidato más allá del bien y del mal, que no necesita ya descender a polemizar en la arena política. Anoche, Angeloz desafió a Menem a un debate en la televisión, pero el candidato peronista no aceptó.

Los radicales mostraron en su propaganda un sillón vacío, mientras Angeloz desafiaba a Menem para el debate de año che. Ante este ataque contra Menem, por no comparecer, la propaganda peronista ha reaccionado con presteza. En un spot de televisión aparece un primer plano de un micrófono que gira, mientras que una voz en off dice "los radicales creen que gobernar es hablar. Por eso se preocupan por una silla vacía en un debate televisivo. Los peronistas estamos preocupados, porque hay otros espacios vacíos. Hay miles de hogares con mesas vacías. Hay fábricas vacías, bancos vacíos, farmacias vacías, supermercados vacíos y hasta hay un sillón presidencial, que parece vacío". Al mismo tiempo que la voz habla del sillón presidencial, el micrófono se viene abajo.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En