Un nuevo plan para la deuda del Tercer Mundo

En su conferencia de prensa del lunes, el presidente electo, George Bush, se unió a la tendencia de opinión generalizada que piensa que ha llegado el momento de revisar la política referente a la deuda exterior del Tercer Mundo. Afirmó que considera necesaria una revisión del Plan Baker original, no iniciar otro más radical. Esto está en total acuerdo con el informe y las recomendaciones que acaba de publicar el Banco Mundial.Sin una financiación adecuada, muchos de estos países encontrarán las reformas económicas intolerablemente duras. Pero si no se progresa en la reforma económica, los banc...

En su conferencia de prensa del lunes, el presidente electo, George Bush, se unió a la tendencia de opinión generalizada que piensa que ha llegado el momento de revisar la política referente a la deuda exterior del Tercer Mundo. Afirmó que considera necesaria una revisión del Plan Baker original, no iniciar otro más radical. Esto está en total acuerdo con el informe y las recomendaciones que acaba de publicar el Banco Mundial.Sin una financiación adecuada, muchos de estos países encontrarán las reformas económicas intolerablemente duras. Pero si no se progresa en la reforma económica, los bancos se mostrarán cada vez más remisos a realizar nuevos préstamos. Es un círculo vicioso. Los mayores deudores necesitan avanzar en sus reformas internas, pero también recompensar de forma más tangible a su propia gente en un proceso que es, para la mayoría, doloroso. En los tres países latinoamericanos con mayor deuda exterior -Brasil, México y Argentina-, los Gobiernos democráticos están bajo una presión creciente. Los movimientos populistas ganan fuerza y centran sus ataques en. la deuda.

El presidente Reagan trató siempre de distanciarse de estos temas, considerando la deuda de los países latinoamericanos como materia privada de los bancos y sus deudores. George Bush lo ve como una amenaza para los intereses de EE UU y se prepara para dar una respuesta.

, 21 de diciembre