La píldora abortiva no será distribuida por los laboratorios que la fabrican

El director de los laboratorios Hoescht AG, Dominik von Winterfeldt, manifestó en conferencia de prensa ayer en Barcelona que "ni Hoescht ni Roussel-Uclaf van a comercializar la píldora abortiva. Y estamos debatiendo cómo salimos de este atolladero".Von Winterfeldt dijo también que "Hoescht es una de las participadas en la empresa francesa Roussel-Uclaf y la relación con ella se tiene ya desde hace unos 20 años, con resultados muy buenos. La investigación que ha llevado al descubrimiento de esta píldora abortiva o píldora para después fue casual, ya que lo que se buscaba era un fármaco para lu...

El director de los laboratorios Hoescht AG, Dominik von Winterfeldt, manifestó en conferencia de prensa ayer en Barcelona que "ni Hoescht ni Roussel-Uclaf van a comercializar la píldora abortiva. Y estamos debatiendo cómo salimos de este atolladero".Von Winterfeldt dijo también que "Hoescht es una de las participadas en la empresa francesa Roussel-Uclaf y la relación con ella se tiene ya desde hace unos 20 años, con resultados muy buenos. La investigación que ha llevado al descubrimiento de esta píldora abortiva o píldora para después fue casual, ya que lo que se buscaba era un fármaco para luchar contra el cáncer. Y se comprobó que este producto obtenido tenía funciones abortivas. En el debate interno en el seno de la empresa se planteó si se comercializaba o no. Ni Hoescht ni Roussel-Uclaf quisieron comercializarla, pero en el accionariado de esta última hay también una parte estatal francesa. Y fue el ministerio de este país el que decidió que se comercializara, aunque sólo de cara a los hospitales especializados".

Otro de los temas abordados por Von Winterfeldt fue el de la ingeniería genética, en el que Hoescht está actuando. En su opinión, las restricciones que en Alemania se están adoptando en este tema son excesivas, sobre todo teniendo en cuenta la línea de actuación de las empresas en Estados Unidos y Japón.

Dijo que habían extremado las exigencias técnicas y que existen problemas políticos y morales: "En muchos sectores existe preocupación de lo que pueda hacerse con la manipulación genética, pero En Hoescht -concluyó- nos hemos comprometido a no utilizar la ingeniería genética en el ser humano".