Un explosivo cruce de cartas en Irán

La reciente difusión de un cruce de supuestas cartas confidenciales entre el primer ministro iraní, Mir Hosein Musavi, y el presidente de la República Islámica, Alí Jamenei, en el que aquél presentó las razones motivadas de su dimisión, inaceptada por éste a primeros del pasado septiembre, ha provocado nuevas fricciones políticas en Irán por la magnitud de las revelaciones que en los textos se incluyen. En su carta de dimisión, manuscrita, Musavi achaca a Jamenei no sólo el quedar, a su costa, al margen de la política exterior iraní en Afganistán, Líbano e Irak, sino que también le atribuye el...

La reciente difusión de un cruce de supuestas cartas confidenciales entre el primer ministro iraní, Mir Hosein Musavi, y el presidente de la República Islámica, Alí Jamenei, en el que aquél presentó las razones motivadas de su dimisión, inaceptada por éste a primeros del pasado septiembre, ha provocado nuevas fricciones políticas en Irán por la magnitud de las revelaciones que en los textos se incluyen. En su carta de dimisión, manuscrita, Musavi achaca a Jamenei no sólo el quedar, a su costa, al margen de la política exterior iraní en Afganistán, Líbano e Irak, sino que también le atribuye el conocimiento previo de actividades terroristas y secuestros aéreos. Mir Hosein Musavi dimitió de la jefatura del Gobierno iraní a primeros del pasado mes de septiembre, por considerar que ocho de sus ministros no iban a conseguir la confianza parlamentaria preceptiva para acceder a las carteras ministeriales, según explicó entonces él mismo en una carta pública difundida por la Prensa oficial iraní. Sin embargo, las cartas ahora divulgadas amplían los motivos de la dimisión, que fue rechazada por el imam Jomeini. Los medios informativos de la oposición a Jomeini, Aksariat, de la Organización de los Fedayin del Pueblo, marxista, y el monárquico Keyhan, respectivamente, que preconizan opciones políticas abiertamente contrapuestas, han difundido en sus últimos números este cruce de cartas reservadas entre Musavi y el presidente de la República, Alí Jamenei. Igualmente, la correspondencia pone de relieve otras discrepancias entre uno y otro dignatarios islámicos y desvela contradicciones en el seno de la cúpula dirigente iraní. El desenlace de ocho años de contienda con Irak, zanjada el pasado mes de agosto con la aceptación iraní de la Resolución 598 de la ONU; la asignación al presidente del Parlamento, Hashemi Ra5anjani, de la jefatura de las Fuerzas Armadas, con la delicada tarea de unificar ejército regular y guardia revolucionaria, y la represión contra la oposición configuran un panorama de inestabilidad que esta correspondencia, sobre la que ninguna fuente oficial consultada se ha pronunciado, contribuye a tensar.