Escándalo en Italia por la publicación de un desnudo masculino como reclamo publicitario

La imagen de un hombre totalmente desnudo que aparece en las páginas del último número del semanario L'Espresso, como base de una campaña publicitaria para demandar la donación de órganos, ha causado escándalo en la opinión pública italiana. El anuncio, que ha sido insertado por la asociación italiana de donantes de órganos, ha sido calificado desde los periódicos como un "atentado de mal gusto". "A partir de ahora", dice un escrito, "veremos estos desnudos viriles para anunciar una crema para la barba"

La revista L'Espresso, con el anuncio del hombre desnudo insertado en su pági...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La imagen de un hombre totalmente desnudo que aparece en las páginas del último número del semanario L'Espresso, como base de una campaña publicitaria para demandar la donación de órganos, ha causado escándalo en la opinión pública italiana. El anuncio, que ha sido insertado por la asociación italiana de donantes de órganos, ha sido calificado desde los periódicos como un "atentado de mal gusto". "A partir de ahora", dice un escrito, "veremos estos desnudos viriles para anunciar una crema para la barba"

Más información

La revista L'Espresso, con el anuncio del hombre desnudo insertado en su página 160 y sufragado por una asociación de donantes de órganos, apareció en los quioscos el lunes. Desde entonces han llovido calificativos sobre el escándalo que ha causado en Italia tal osadía. El calificativo más piadoso de entre todos los divulgados ayer en la Prensa italiana es el de "anuncio contraproducente para una causa justa", que publica el periódico laico La Stampa de Turín, propiedad de Fiat. La causa justa es la publicidad de la Asociación Italiana de Donantes de Órganos para los trasplantes (AIDO).El anuncio "contraproducente", según el diario turinés, es un desnudo maculino integral, el primero aparecido en este país en un semanal informativo, y es calificado de "desnudo viril integralmente ostentado".

Lo que molesta a La Stampa, molestia que no dejará de suscitar polémica, es que el desnudo masculino reza así: "Hay un tesoro en ti, no lo sepultes". Y añade, "piensa: ofrece a los otros lo que querríamos que nos ofreciesen a nosotros".

Órgano no trasplantable

La Stampa hace el siguiente comentario: "Echamos un vistazo al desnudo y sí que pensamos. Pero nos quedamos perplejos y a disgusto. ¿Por qué?, podrían preguntarse los lectores". Y el diario de la Fiat responde: "Porque en este contexto, órgano no sugiere pensar en el corazón, el hígado o la córnea de los ojos. Curiosamente, lo que más sobresale del anuncio no es trasplantable".El diario de Turín añade, sin embargo, que lo que le molesta no es que en este país haya caído con este anuncio el último tabú de la publicidad al publicar el primer desnudo integral maculino en una revista para todos los públicos, sino que el anuncio sea "ambiguo" y concluye que no es un problema de moral sino "de gusto".

La denuncia del diario se extiende en que "la publicidad ha desembocado en un camino donde todo se utiliza para reclamar la atención del consumidor. Hasta ahora, nos hemos encontrado desnudos femeninos y masculinos de una manera o de otra".

Llamar la atención

"A partir de ahora, veremos estos desnudos viriles para anunciar una crema para la barba, un whisky o cualquier otra cosa. Estas manifestaciones son inútiles y gratuitas", añade La Stampa. "No importa: lo que vale es que llamen la atención aunque sea provocando y esto es lo que nos preocupa". Pero lo cierto es que este país mantiene aún en ciertos sectores algunos tabúes que en otros países, como por ejemplo España, han sido ya superados desde hace tiempo.Hay quien dice que este escándalo se debe a la influencia que ejerce el Vaticano en Italia. Otros, sin embargo, lo atribuyen a las secuelas de la todavía vigente civilización agrícola de este país, que siempre ha sido muy conservadora, en particular, en cuestiones de sexualidad.

Archivado En