La producción tabaquera bajará este año en un 30%

Aproximadamente el 30% de la producción tabaquera española prevista para esta campaña se ha perdido a consecuencia de las lluvias y los pedriscos de los últimos meses. Estas pérdidas se han concentrado especialmente en las provincias de Cáceres, Ávila, Toledo y León.La producción asignada a España asciende a 11.000 toneladas de tabaco Virginia, 28.000 toneladas de Burley fermentable o procesable y 1.000 toneladas de Habana. Las condiciones climatológicas de los últimos meses han afectado negativamente al desarrollo de las plantas, hasta arrojar una reducción en el volumen del tabaco de unas 14...

Aproximadamente el 30% de la producción tabaquera española prevista para esta campaña se ha perdido a consecuencia de las lluvias y los pedriscos de los últimos meses. Estas pérdidas se han concentrado especialmente en las provincias de Cáceres, Ávila, Toledo y León.La producción asignada a España asciende a 11.000 toneladas de tabaco Virginia, 28.000 toneladas de Burley fermentable o procesable y 1.000 toneladas de Habana. Las condiciones climatológicas de los últimos meses han afectado negativamente al desarrollo de las plantas, hasta arrojar una reducción en el volumen del tabaco de unas 14.000 toneladas. El valor de la cosecha rondaba los 13.000 o 14.000 millones de pesetas, y las pérdidas no son inferiores a los 4.500 millones de pesetas.

El tabaco es la producción en la que existen los mayores porcentajes de superficies aseguradas en relación con el total. Mientras la media nacional para el conjunto de las producciones apenas si supera el 22%, en el tabaco ese porcentaje asciende al 50%. En consecuencia, parte de esos daños va a ser compensada con los seguros, lo cual reduce la gravedad de la catástrofe. Sin embargo, para la Federación de Cultivadores la preocupación se centra en la posibilidad de que los malos resultados en varios años puedan ser utilizados como instrumento en contra desde la CE para fijar los estabilizadores y reducir nuestro techo.

Por ello, desde esta organización se anima a los productores para que, aunque tengan los seguros, salven la mayor parte posible de la cosecha, con vistas a ofrecer la máxima producción en la campaña. España se niega a que estos datos a la baja se tengan en cuenta para computar nuestras producciones medias.