Tribuna:

Desaparecidos o muertos

Habla Agni Hadinicolaos, esposa o viuda del juez de Nicosia Cristos Hadinicolaos, desaparecido en Jalusa, norte de Chipre, el 19 de agosto de 1974, poco después de la invasión de las fuerzas de Ankara y de la partición de la isla. La semana pasada se manifestó en la plaza atenlense de Sintagma, ante la tumba del Soldado Desconocido, con otras esposas, madres y hermanas que pueden contar tragedias tan simples y desgarradoras como la suya. Su hijo Panos, que tenía seis años cuando ocurrieron los hechos, hace de intérprete."Los soldados turcos se presentaron en el café en el que estaba mi marido....

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Habla Agni Hadinicolaos, esposa o viuda del juez de Nicosia Cristos Hadinicolaos, desaparecido en Jalusa, norte de Chipre, el 19 de agosto de 1974, poco después de la invasión de las fuerzas de Ankara y de la partición de la isla. La semana pasada se manifestó en la plaza atenlense de Sintagma, ante la tumba del Soldado Desconocido, con otras esposas, madres y hermanas que pueden contar tragedias tan simples y desgarradoras como la suya. Su hijo Panos, que tenía seis años cuando ocurrieron los hechos, hace de intérprete."Los soldados turcos se presentaron en el café en el que estaba mi marido. Les acompañaban dos turcochipriotas, Jafer Mehmet, al que llamaban Kilo, y Yahan Satik. Nunca olvidaré sus nombres. Ése, ése, ése y ése, dijeron a los soldados. Y se los llevaron. Jamás he vuelto a ver a Cristos. Yo todavía me quedé dos meses en Jalusa, adonde habíamos ido a pasar las vacacio-nes, haciendo lo imposible por encontrarle, angustiada, con mis dos hijos, de cinco y seis años. Luego volvimos todos a Nicosia. En Jalusa quedaron iina casa y una cuenta en el banco, pero eso no importa. Yo lo que quiero es que aparezca mi marido", afirma.

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"Él era, es, un hombre bueno, nunca tuvo problemas con llos turcos", agrega. "Luego me llegaron rumores de que había sido visto con vida, pero no se pudieron confirmar. En 1975, cuando Denktash (el líder turcochipriota) se reunió con Makarios (presídente de la República de Chipre), el arzobispo le preguintó por Cristos. Denktash le contestó: 'Los de Jalusa fueron ejecutados'. Pero no presentó ninguna prueba. Posteriormente, la asociación de jueces pidió autorización para investigar en el Norte el caso. El líder turcochipriota se negó".

"¿Qué opino del llamado espíritu de Davos? Que Ozal y Papandreu pueden seguir hablando 10 años sin llegar a ningún resultado tangible. Hablan de no guerra, pero en Chipre hay una guerra, un ejército de ocupación. Que sus soldados se vayan de Chipre, que retiren a los colonos que han llevado de Anatolia, que se aclare la suerte de los desaparecidos. Entonces podrán hablar de no guerra, y hasta de paz", concluye.

Un comité tripartito especial, a cuyo frente está un representante de la Cruz Roja, estudia desde hace años la cuestión, "entre dificultades prácticas y psicológicas", según ha manifestado el secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar. Ahora tiene entre manos 169 casos de desaparecidos, turcochipriotas y grecochipriotas. Pero no hay resultados palpables hasta el momento. Ni es probable que los haya.

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