La CE aprueba la libre circulación del transporte por carretera para 1992
Los ministros de Transporte de los doce dieron ayer un paso de gigante hacia la creación del gran mercado único al alcanzar un compromiso sobre la total liberalización del transporte por carretera en tres etapas que concluirán a finales de 1992. El acuerdo de principio constituye un nuevo éxito de la actual presidencia alemana de la Comunidad Europea (CE), que no duda, según la expresión de un diplomático, "en echar toda la carne en el asador para forjar compromiso".
Reunidos durante el almuerzo en torno al ministro alemán Juergen Warnke sus 11 homólogos europeos, entre los que figuraba...
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Los ministros de Transporte de los doce dieron ayer un paso de gigante hacia la creación del gran mercado único al alcanzar un compromiso sobre la total liberalización del transporte por carretera en tres etapas que concluirán a finales de 1992. El acuerdo de principio constituye un nuevo éxito de la actual presidencia alemana de la Comunidad Europea (CE), que no duda, según la expresión de un diplomático, "en echar toda la carne en el asador para forjar compromiso".
Reunidos durante el almuerzo en torno al ministro alemán Juergen Warnke sus 11 homólogos europeos, entre los que figuraba el español Abel Caballero, se pusieron de acuerdo en aumentar este mismo año en un 40%, y en otro tanto en 1989, el número de licencias comunitarias para transportistas que permiten circular sin restricciones por toda la CE.Los contingentes de camiones autorizados a cruzar fronteras europeas desaparecerán por completo el 1 de enero de 1993, según apalabraron también los ministros, pero año y medio antes los doce habrán pactado las modalidades de su supresión y de la consiguiente armonización ele las legislaciones fiscal y social que rigen el transporte por carretera.
La República Federal de Alemania, dónde esta actividad está fuertemente gravada y cuya legislación laboral es más estricta, exigía un compromiso de sus socios sobre la armonización para aceptar una liberalización que consideraba indispensable para la creación del mercado único porque las actuales restricciones suponen auténticas trabas al comercio intracomunitario.
Un camionero portugués que pretende, por ejemplo, transportar fruta a Dinamarca necesita tres licencias bilaterales para que su vehículo pueda cruzar España, Francia, Alemania Federal antes de llegar a su destino o una comunitaria mientras su cargamento no requiere este tipo de permisos. Actualmente el 54% del transporte intracomunitario por carretera se efectúa gracias a licencias bilaterales, que también desaparecerán en 1993, mientras el 26% goza de licencias comunitarias o no está sometido a ninguna autorización.
Camiones españoles
El 12,2% del transporte por carretera intracomunitario es efectuado por camiones españoles y España posee actualmente 1.225 licencias comunitarias que aumentarán este mismo año hasta 1.715 y en 1989 hasta 2.40 1. Además, a estas licencias hay que añadir otras 149.910 bilaterales, la mayoría con Francia (79.500) y sólo ha puesto en práctica un régimen de total libertad con Grecia.El anunciado debate entre los ministros comunitarios sobre las medidas a tomar para hacer frente a un posible colapso del tráfico aéreo en Europa durante el verano quedó en agua de borrajas porque los responsables de Transporte se limitaron a tener un intercambio informal de datos y previsiones.