Una abogada de Granada, agredida brutalmente por el marido de su clienta
La abogada Encarnación García Camacho, de 30 años, fue agredida la tarde del martes pasado en una cafetería de Granada por el antiguo marido de una clienta a la que tramitaba una solicitud judicial para cambiar la custodia de su hija. Encarnación García ingresó en un centro hospitalario con múltiples hematomas e inconsciente. La paciente abandonó ayer el hospital de Traumatología. El Colegio de Abogados de Granada ha anunciado que ejercitará acciones penales contra el presunto agresor, al tiempo que ha condenado "toda clase de actuación que trate de coartar la libertad de defensa".
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La abogada Encarnación García Camacho, de 30 años, fue agredida la tarde del martes pasado en una cafetería de Granada por el antiguo marido de una clienta a la que tramitaba una solicitud judicial para cambiar la custodia de su hija. Encarnación García ingresó en un centro hospitalario con múltiples hematomas e inconsciente. La paciente abandonó ayer el hospital de Traumatología. El Colegio de Abogados de Granada ha anunciado que ejercitará acciones penales contra el presunto agresor, al tiempo que ha condenado "toda clase de actuación que trate de coartar la libertad de defensa".
La abogada trabaja en un bufete junto a dos compañeras más. La agresión se produjo hacia las 18.00 horas del martes cuando Encarnación tomaba café en un establecimiento cercano a su lugar de trabajo. El presunto agresor, Nelson Barthelmes, entró en el local y sin mediar palabra le propinó un golpe que la dejó sin sentido. "No sé como pasó, sólo recuerdo su rostro y que me acusó de ser la culpable de que no pudiera volver a ver a su hija".Encarnación García cubre el turno de oficio y está especializada en asuntos laborales. Hace unos meses firmó un procedimiento judicial solicitando el cambio de custodia de la hija de una amiga cuyo matrimonio ya estaba disuelto. La modificación de las medidas adoptadas por un juez tras un caso de divorcio se hace cuando las circunstancias personales de uno de los cónyuges ha variado desde que se dictara sentencia. "A él lo había visto dos o tres veces en el juzgado cuando fue llamado a declarar, pero nunca habíamos hablado", agrega.
A golpes
"Según dicen, porque no recuerdo nada, me tiró al suelo de un golpe. Luego fui trasladada a urgencias y de allí pasé a observación en el centro de Traumatología", manifiesta la letrada, que deberá pasar una semana en reposo en su domicilio y que está sometida a tranquilizantes. "Yo firmé el procedimiento judicial porque me lo pasó una compañera del bufete, sin tener especial conocimiento de las circunstancias del mismo", continúa. Encarnación presentaba ayer numerosos hematomas en la cabeza y brazos y rasguños en la nariz y las cejas.Por su parte, la junta de gobierno del Colegio de Abogados manifestó ayer, mediante un comunicado, "el total apoyo a la víctima". El Colegio también ha anunciado que ejercitará acciones penales contra el agresor, además de las que sigue el juzgado tras serle remitido el parte médico desde el centro hospitalario. Por su parte, el grupo de Abogados Jóvenes de Granada ha hecho un llamamiento a la autoridad judicial "para que hechos como el indicado sean perseguidos con todo el rigor de la ley a fin de que la libertad de defensa no sea coartada".