El CSN pedirá al Gobierno una decisión sobre residuos radiactivos

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) va a elaborar un documento en el que instará al Gobierno para que tome una decisión sobre el destino que deben darse a los residuos radiactivos de alta actividad que provienen de las centrales nucleares españolas, según explicó ayer el presidente de este organismo, Donato Fuejo, quien añadió que el Consejo ha estudiado ya el tema.

La urgencia de esta medida viene determinada por el hecho de que en 1993 la central de Almaraz 1 será la primera que cumple el ciclo de almacenamiento en la propia piscina nuclear de los residuos de alta activid...

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) va a elaborar un documento en el que instará al Gobierno para que tome una decisión sobre el destino que deben darse a los residuos radiactivos de alta actividad que provienen de las centrales nucleares españolas, según explicó ayer el presidente de este organismo, Donato Fuejo, quien añadió que el Consejo ha estudiado ya el tema.

La urgencia de esta medida viene determinada por el hecho de que en 1993 la central de Almaraz 1 será la primera que cumple el ciclo de almacenamiento en la propia piscina nuclear de los residuos de alta actividad resultantes de la utilización del combustible nuclear. La Administración todavía no ha decidido cuál será el sistema de almacenamiento definitivo de estos residuos, que requieren un tratamiento muy sofisticado debido a su alta peligrosidad.

Donato Fuejo añadió que, si el Gobierno no toma una decisión sobre este asunto, el Consejo de Seguridad Nuclear se verá obligado a no autorizar nuevas centrales si no se especifican claramente dónde se han de almacenar estos residuos. "Además, cualquiera que sea el destino que se dé a ese tipo de residuos, éstos han de estar accesibles para que el Consejo de Seguridad Nuclear pueda ejercer un control sobre ellos", añadió.

6.000 bidones

Cada una de las centrales nucleares españolas -ocho en funcionamiento- tiene un centro de almacenamiento de residuos de alta actividad con capacidad para mantenerlos durante 10 años. Como soluciones al problema que se va a plantear en todas ellas a partir de 1993, se apuntan las de ampliar la propia piscina de las centrales, trasladar estos residuos a otras centrales, o buscar una salida de almacenamiento centralizado en seco. Cualquiera las soluciones que se adopten requerirán complicados procesos de seguridad.La Administración deberá resolver también el destino definitivo de los residuos de media y baja actividad que se encuentran centralizados en el depósito de El Cambril (Córdoba), donde hay unos 6.000 bidones.