Polémica en Portugal tras la desaparición de un dirigente guerrillero mozambiqueño

La desaparición del ex secretario general de la Resistencia Nacional Mozambiqueña (Renamo) Evo Fernández, de 44 años, presuntamente secuestrado por agentes del régimen de Maputo, ha reactivado las especulaciones acerca de las divisiones entre las distintas ramas de la oposición de ese país exiliadas en la ex capital colonial.El dirigente desaparecido era uno de los máximos representantes de la línea dura, y sus principales enemigos se encuentran entre los moderados de la guerrilla que, respaldados por Estados Unidos, desean negociar un alto al fuego. Medios de la Renamo en Lisboa...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La desaparición del ex secretario general de la Resistencia Nacional Mozambiqueña (Renamo) Evo Fernández, de 44 años, presuntamente secuestrado por agentes del régimen de Maputo, ha reactivado las especulaciones acerca de las divisiones entre las distintas ramas de la oposición de ese país exiliadas en la ex capital colonial.El dirigente desaparecido era uno de los máximos representantes de la línea dura, y sus principales enemigos se encuentran entre los moderados de la guerrilla que, respaldados por Estados Unidos, desean negociar un alto al fuego. Medios de la Renamo en Lisboa, sin embargo, insisten en acusar del secuestro a los servicios secretos de Maputo.

La esposa de Fernández, Ivete, ha asegurado que su marido ha sido llevado a Maputo muerto o vivo, y basa sus afirmaciones en una llamada que recibió el martes de un supuesto agente mozambiqueño, quien le reveló que su marido salió de Portugal en la mañana del lunes, vía Madrid y Argel.

Fernández había cenado el domingo con Xavier Chagas, un agente mozambiqueño que presuntamente servía de intermediario entre el dirigente rebelde y las autoridades de su país, que buscan una apertura de negociaciones con la guerrilla. Tras la cena, en un restaurante de Cascais, ambos hombres fueron vistos salir y luego desaparecieron sin dejar rastro.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En