La policía italiana incauta 60 toneladas de bombas destinadas ilegalmente a Irak

Fuerzas de la policía y los carabineros han incautado en los últimos días 60 toneladas de bombas en el aeropuerto de Fiumicino, de Roma, que iban a ser enviadas ilegalmente a Irak. Mientras tanto, en Bolonia ha sido detenido el sacerdote católico italonorteamericano Lorenzo Zorza, uno de los protagonistas de la llamada Pizza Connection número 2 de Nueva York.La noticia de la captura de las granadas anticarro, capaces de perforar una chapa blindada de 30 centímetros de espesor, se ha sabido después de 10 días. Según los investigadores policiales italianos, han sido ilegalmente enviad...

Fuerzas de la policía y los carabineros han incautado en los últimos días 60 toneladas de bombas en el aeropuerto de Fiumicino, de Roma, que iban a ser enviadas ilegalmente a Irak. Mientras tanto, en Bolonia ha sido detenido el sacerdote católico italonorteamericano Lorenzo Zorza, uno de los protagonistas de la llamada Pizza Connection número 2 de Nueva York.La noticia de la captura de las granadas anticarro, capaces de perforar una chapa blindada de 30 centímetros de espesor, se ha sabido después de 10 días. Según los investigadores policiales italianos, han sido ilegalmente enviadas ya a Irak 200 toneladas de dichas bombas, mientras otras 30 toneladas han sido incautadas en dos fábricas italianas. Por el momento, han sido detenidos sólo dos árabes.

Cuando la policía y carabineros incautaron las bombas en el aeropuerto, éstas estaban colocadas en cajas todas iguales -algunas ya cargadas en un avión de bandera iraquí y otras al pie del aparato, a punto de ser embarcadas rumbo a Bagdad que figuraban como "piezas mecánicas de repuesto". Desde 1984 existe en Italia un embargo total de armas con destino a Irán e Irak.

Otro de los detalles que han despertado gran preocupación es que esas toneladas de bombas eran enviadas a Bagdad en aviones civiles de pasajeros.

Por lo que se refiere al sacerdote italiano Lorenzo Zorza, de 46 años de edad, buscado por la Interpol y capturado por la policía italiana en casa de una restauradora de arte en Bolonia, permanece aún en el aire la incógnita de si se trata de un auténtico mafioso o de un infiltrado de la policía.

De él hablé por vez primera Carlo, el hijo de Roberto Calvi -el financiero implicado en la bancarrota del Banco Ambrosiano que apareció ahorcado bajo un puente de Londres-, afirmando que era uno de los correos de la droga entre Estados Unidos y la Mafia. Y su nombre había aparecido ya varias veces en los documentos de la comisión parlamentaria que investigó sobre la logia clandestina masónica Propaganda Dos (P-2), de Licio Gelli.