El Gobierno y los aliados negocian principios globales sobre misiones

La visita del general John Galvin a Madrid es la primera que realiza a España un comandante supremo de la OTAN en Europa. Su predecesor, el general Bernard Rogers, visitó la colonia de Gibraltar, pero no estuvo en Madrid. La llegada de Galvin coincide con la negociación que España y la OTAN mantienen para determinar la aportación militar española a la Alianza, proceso concretado hoy en la elaboración de un documento en el que se recojan las líneas generales para todos los acuerdos de coordinación correspondientes a las seis misiones militares propuestas por España.En ese documento, España pret...

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La visita del general John Galvin a Madrid es la primera que realiza a España un comandante supremo de la OTAN en Europa. Su predecesor, el general Bernard Rogers, visitó la colonia de Gibraltar, pero no estuvo en Madrid. La llegada de Galvin coincide con la negociación que España y la OTAN mantienen para determinar la aportación militar española a la Alianza, proceso concretado hoy en la elaboración de un documento en el que se recojan las líneas generales para todos los acuerdos de coordinación correspondientes a las seis misiones militares propuestas por España.En ese documento, España pretende que se incluyan, de manera resumida, las condiciones o exigencias españolas sobre la contribución militar a la Alianza. Así, en el informe deberá figurar de nuevo que España no está en la estructura militar integrada de la OTAN y que rechaza cualquier tipo de coordinación con el mando aliado en Gibraltar (Gibmed).

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En la actualidad, las negocaciones para redactar ese informe -que posteriormente figurará como preámbulo en los acuerdos de coordinación- se encuentran bastante avanzadas, pero siguen existiendo reticencias por parte de algunos aliados, como Portugal, Reino Unido y EE UU.

Reticencias aliadas

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En el caso de Portugal, las reticencias existen porque España pretende intervenir en el Atlántico Oriental, donde Portugal mantiene hoy un protagonismo militar que disminuirá con la presencia de unidades navales y aéreas españolas en misiones de la OTAN. Con respecto al Reino Unido, España desea realizar la misión del control del Estrecho de Gibraltar y sus accesos, pero los británicos desean mantener el mando aliado en el Peñón. Por su parte, EE UU desea que España acabe estando en la estructura militar integrada.

El documento especificará el hecho de que los ejercicios aliados en el área de interés estratégico español podrán hacerse bajo control operativo de algún país aliado o bajo control español; recordará que las tropas españolas actuarán "preferentemente" dentro de ese espacio de interés -no se descarta, por tanto, lo contrario-; y precisará que España contará con enlaces militares ante los mandos aliados Saceur -mando europeo-, Saclant -mando atlántico- y quizás Cinchan -mando del Canal de la Mancha-

Aceptado el documento -quizás antes de un mes-, España y la OTAN negociarán los acuerdos de coordinación. Los que afecten al Saceur, serán suscritos por Galvin, por parte aliada, y por el teniente general Gonzalo Puigcerver, jefe del Estado Mayor de la Defensa.

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