Los rumores sobre un accidente nuclear en la URSS hicieron caer la Bolsa de Nueva York, que se recuperó tras su desmentida

Nada más conectar sus pantallas ayer la Bolsa de Nueva York, los rumores de que se había producido un accidente nuclear en la Unión Soviética, junto con la incertidumbre producida por la segunda parte de la refinanciación del Tesoro, provocaron una caída de 10 puntos en el Dow Jones.A media sesión, la estabilidad que había demostrado el dólar y la comprobación de que los rumores sobre el accidente eran falsos, hicieron subir el índice en la misma proporción en que había caído.

Los mercados, a excepción del de renta fija, permanecieron sin orientación, aunque con una tendencia más ac...

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Nada más conectar sus pantallas ayer la Bolsa de Nueva York, los rumores de que se había producido un accidente nuclear en la Unión Soviética, junto con la incertidumbre producida por la segunda parte de la refinanciación del Tesoro, provocaron una caída de 10 puntos en el Dow Jones.A media sesión, la estabilidad que había demostrado el dólar y la comprobación de que los rumores sobre el accidente eran falsos, hicieron subir el índice en la misma proporción en que había caído.

Los mercados, a excepción del de renta fija, permanecieron sin orientación, aunque con una tendencia más acusada hacia la baja, por lo que las alzas, tanto de la bolsa como del dólar, se ven limitadas.

Al mismo tiempo, existen factores positivos que limitan las presiones vendedoras. Uno de ellos es el descenso de los tipos de interés, que , a su vez, se ve propiciado por la buena marcha del mercado de bonos y del dólar.

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Por otro lado, continúa el goteo en la publicación de las grandes magnitudes de la economía norteamericana, destacando ayer los pedidos industriales con un alza del 2,5% durante el mes de diciembre, frente al 0,1% que habían registrado en noviembre. Estos datos confirman, una vez más, según Shearson Lehman, el buen momento por el que atraviesan los sectores productivos norteamericanos en claro contraste con la debilidad del consumo.

Por su parte, el oro vio como descendía su cotización hasta niveles más bajos desde julio de 1987, fijándose finalmente el precio de la onza en 443,5 dólares.

Este descenso se debe, según los analistas, a la falta de expectativas inflacionista.

En cuanto a Europa, destacaron únicamente la bajada de los tipos de interés oficiales establecida en Suiza y el descenso, también, de la Bolsa de Londres, que sigue manteniendo esta tendencia a la baja tras el anuncio de la subida de sus tipos.

Los valores del Estado, que habían empezado la sesión con ganancias debido a la fortaleza de los bonos estadounidenses y a la firmeza de la libra, no lograron mantener el avance y volvieron a los niveles de partida. El índice Financial Times cerró a 1.413,2, con una pérdida de 6,9 puntos.

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