Siete familias gitanas quieren volver a Martos, donde les incendiaron las viviendas

Siete de las 22 familias gitanas que en julio de 1986 fueron expulsadas de sus viviendas -alguna de las cuales fueron incendiadas- de Martos (Jaén) han expresado su deseo de volver a vivir en este pueblo. La Junta de Andalucía inició ayer las gestiones para la compra de viviendas de segundo uso, considerablemente más baratas que las recién construidas, en las localidades que cada una de estas familias ha elegido para fijar su residencia.Con la compra de estas viviendas y su entrega a los afectados, la Dirección General de Servicios Sociales, dependiente de la Consejería de Trabajo de la Junta ...

Siete de las 22 familias gitanas que en julio de 1986 fueron expulsadas de sus viviendas -alguna de las cuales fueron incendiadas- de Martos (Jaén) han expresado su deseo de volver a vivir en este pueblo. La Junta de Andalucía inició ayer las gestiones para la compra de viviendas de segundo uso, considerablemente más baratas que las recién construidas, en las localidades que cada una de estas familias ha elegido para fijar su residencia.Con la compra de estas viviendas y su entrega a los afectados, la Dirección General de Servicios Sociales, dependiente de la Consejería de Trabajo de la Junta de Andalucía, da por concluidos los compromisos asistenciales que asumió después de que varios vecinos de Martos incendiaran las viviendas de las familias gitanas tras una pelea entre un gitano y un payo. El presupuesto que la mencionada dirección general destinará a la compra de estas casas es de entre 55.200.000 y 69.200.000 pesetas, según las estimaciones realizadas de acuerdo con los precios de los inmuebles en las distintas localidades que estas familias han elegido para residir.

Las 22 familias han optado por localidades andaluzas. La mayoría de las familias, 13, han elegido localidades jiennenses. Las otras nueve vivirán en la provincia de Córdoba.