Un 'ordinovista' en España
Eliodoro Pomar se doctoró en ingeniería, especialidad sobre carburantes sustitutorios y bencenos sintéticos, en la universidad de Palermo. Fue acusado a comienzos de los setenta por varios magistrados italianos de complicidad en el fallido golpe negro del príncipe Valerio Borghese.
El ultraderechista italiano huyó de Ralla en septiembre de 1974 y, después de pasar por Bélgica, se refugió en Madrid, donde estuvo en contacto con toda la colonia de fascistas italianos y miembros de la extrema derecha extranjeros que se trasladaron a España al ser perseguidos en sus países de origen....
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Eliodoro Pomar se doctoró en ingeniería, especialidad sobre carburantes sustitutorios y bencenos sintéticos, en la universidad de Palermo. Fue acusado a comienzos de los setenta por varios magistrados italianos de complicidad en el fallido golpe negro del príncipe Valerio Borghese.
El ultraderechista italiano huyó de Ralla en septiembre de 1974 y, después de pasar por Bélgica, se refugió en Madrid, donde estuvo en contacto con toda la colonia de fascistas italianos y miembros de la extrema derecha extranjeros que se trasladaron a España al ser perseguidos en sus países de origen.
A finales de enero de 1977, Pomar fue arrestado por la policía española junto con Marco Pozzan (alias Mario Zanella), Elio Massagrande y Pietro Benvenuto, como organizadores de la fábrica de almas de la calle Pelayo. Todos ellos fueron amnistiados en 1977, incluido el español Mariano Sánchez Covisa, también implicado en esa acción.
Absuelto en 1979
Pozzan, según algunas informaciones, se refugió en Madrid gracias a una documentación falsa que le fue proporcionada por los servicios secretos italianos, en concreto por el general del SID Maletti, para intentar conocer los movimientos de la colonia fascista italiana en España.Eliodoro Pomar fue absuelto de este delito en 1979 y, según informaciones italianas contrastadas en España, permanece aún en nuestro país.
Las autoridades judiciales italianas solicitaron la extradición a España del ultraderechista italiano por su presunta implicación en el asesinato del juez Occorsio, así como por la organización de Ordine Nuovo. La Audiencia Nacional no concedió en ninguno de los casos la extradición del ultraderechista, como occurió con la mayoría de sus compatriotas.