Fría acogida de la CE a la petición de acogida de Marruecos

Marruecos presentó ayer oficialmente su candidatura a la plena integración en la Comunidad Europea (CE), pero recibió una acogida relativamente fría por parte de la actual presidencia de la CE, que ostenta Dinamarca. El ministro marroquí de Exteriores del país norteafricano, Abdelatif Filali, entregó a su homólogo danés, Uffe Elleman-Jensen, una carta del rey Hassan II en la que se formula la petición. Elleman-Jensen contestó, según fuentes allegadas a la presidencia, que, en su opinión, Marruecos no cumple todos los requisitos, porque no forma parte de Europa desde un punto de vista geográfic...

Marruecos presentó ayer oficialmente su candidatura a la plena integración en la Comunidad Europea (CE), pero recibió una acogida relativamente fría por parte de la actual presidencia de la CE, que ostenta Dinamarca. El ministro marroquí de Exteriores del país norteafricano, Abdelatif Filali, entregó a su homólogo danés, Uffe Elleman-Jensen, una carta del rey Hassan II en la que se formula la petición. Elleman-Jensen contestó, según fuentes allegadas a la presidencia, que, en su opinión, Marruecos no cumple todos los requisitos, porque no forma parte de Europa desde un punto de vista geográfico ni es miembro del Consejo de Europa, organización a la que, además de los 12 Estados de la CE, están afiliados otros nueve países del ámbito europeo.

Aunque recordó estos argumentos ante la Prensa, Elleman-Jensen se declaró, sin embargo, "satisfecho" por la carta recibida, que expresa la intención de reforzar las relaciones entre Marruecos y la CE y equivale a "una clara señal de la orientación proeuropea" de aquel país norteafricano.Las "dificultades jurídicas" para que prospere la adhesión marroquí fueron también subrayadas por el ministro español de Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, que aseguró, no obstante, que "Madrid favorecía la mayor vinculación posible de Rabat a la Comunidad Europea dentro de lo permitido por el marco jurídico".

Primera candidatura

Fernández Ordóñez asistió ayer en la capital belga a un Consejo de Ministros de los doce, que durante el almuerzo intercambiaron impresiones sobre la primera candidatura de un país no europeo.

["España mantiene excelentes relaciones de amistad con Marruecos", subrayó Femández Ordóñez, y explicó que el interés marroquí por integrarse en la Comunidad Europea "no es nuevo para mí, ni tampoco lo es para la Comunidad Europea", informa Efe. Por otra parte, el ministro español de Asuntos Exteriores afirmó que esta iniciativa marroquí "no condiciona" las negociaciones para la firma de un acuerdo pesquero y comercial entre Rabat y la Comunidad Europea. Está previsto que Marruecos y la CE comiencen el próximo miércoles las negociaciones para concluir un acuerdo pesquero, y manifestó su alivio ante el compromiso de Marruecos de prolongar el actual convenio con España en el caso de que las negociaciones no hubiesen terminado antes del día 31 de este mes.]

Filali justificó la misiva de Hassan II en el curso de un breve encuentro con la Prensa, mantenido justo antes de abandonar Bruselas, recordando el reciente ingreso en la Comunidad Europea de España y de Portugal, países con los que Marruecos "tiene muchas afinidades", y, por tanto, "se considera con derechos a formular la petición".

La petición de Turquía

En opinión del jefe de la diplomacia marroquí, "la demanda de Turquía contribuirá también a facilitar las cosas".

El pasado mes de abril, el Gobierno de Ankara presentó también formalmente su candidatura al ingreso en el club de los doce, pero, a diferencia de Marruecos, que es totalmente africano, parte del territorio turco esta situado en Europa.Sugerida por primera vez hace cuatro años en una carta que el rey Hassan II de Marruecos remitió al presidente de la República Francesa, François Mitterrand, la solicitud marroquí ha causado cierta sorpresa en los ambientes comunitarios, donde casi nadie se la esperaba, como tampoco parecía tenerla in mente el Gobierno de Rabat.

El titular español de Asuntos Exteriores, que se cruzó con Filali al entrar en la sede del Consejo de Ministros de la Comunidad Europea, afirmó, en cambio, que la iniciativa marroquí no le había extrañado, "porque fui puesto al corriente de sus intenciones durante mi última visita a Rabat". Casi todas las fuentes consultadas no creen que Marruecos piense realmente que puede llegar a ingresar en la Comunidad Europea, pero que sí intenta, a través de esta iniciativa, afianzar su relación con el Viejo Continente y convertirse en su interlocutor privilegiado en el norte de África.

"Tiene sobre todo un valor simbólico", comentaba un alto funcionario del Ejecutivo europeo que prefirió permanecer en el anonimato. Preguntado sobre las verdaderas intenciones del rey Hassan II y su ministro, Fernández Ordóñez respondió: "No me atrevo a contestar".

Queda por ver ahora cómo será tramitada la petición del soberano, que primero será estudiada, en septiembre, por el Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores, que puede solicitar entonces a la Comisión Europea -como hizo en abril con el caso de Turquía- que elabore un informe que suele tardar años en redactar.

La no tramitación formal de la candidatura presentada por Marruecos podría ser considerada por Rabat como un feo por parte de los doce.