El fiscal pide nueve años de cárcel para el padre que mató a palos al novio de su hija

El fiscal solicitó ayer nueve años de prisión para Miguel Gutierro Ruiz, de 41 años, que el pasado mes de noviembre mató a palos a su sobrino Isidro Ruiz, de 15 años, al que sorprendió en la cama con su hija Paqui, también de15 años. La defensa pidió la libre absolución por trastorno mental transitorio y legítima defensa del honor familiar.

Los hechos que ayer se juzgaron en la Audiencia Provincial de Cáceres ocurrieron en Miajadas, un pueblo cacereño de poco más de 8.000 habitantes, el 5 de noviembre de 1986. El acusado, Miguel Gutierro, obrero agrícola, confesó ante el tribunal que e...

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El fiscal solicitó ayer nueve años de prisión para Miguel Gutierro Ruiz, de 41 años, que el pasado mes de noviembre mató a palos a su sobrino Isidro Ruiz, de 15 años, al que sorprendió en la cama con su hija Paqui, también de15 años. La defensa pidió la libre absolución por trastorno mental transitorio y legítima defensa del honor familiar.

Los hechos que ayer se juzgaron en la Audiencia Provincial de Cáceres ocurrieron en Miajadas, un pueblo cacereño de poco más de 8.000 habitantes, el 5 de noviembre de 1986. El acusado, Miguel Gutierro, obrero agrícola, confesó ante el tribunal que entró, como era su costumbre, muy temprano -a las 6.30- en la habitación de sus hijos para darles un beso y arropar a los más pequeños antes de ir a trabajar. Fue entonces cuando vio un hombre en la cama de su hija Paqui y, "en total descomposición" salió al corral de la vivienda: tomó un palo y la emprendió a golpes con el joven. Luego arrastró el cuerpo hasta el patio, don de comprobó que era su propio sobrino. Miguel Gutierro dijo entonces a su mujer, en medio de sollozos, que avisara a la Guardia Civil.Paqui, que compareció ante el tribunal con aire compungido, declaró que aquella era la primera noche que Isidro entraba en su habitación. La joven salía con lsidro pese a la oposición de la famiIia, que le había regañado varias veces por relacionarse con Isidro. Paqui añadió que, pese a la oposición paterna, el joven entraba en la casa y que ella le escribía cartas de amor. Agregó que Isidro entró en su cuarto una hora antes de que se produjera la tragedia. Cuando sonó el despertador en el cuarto de sus padres, precisó, ella se asustó, pero el joven le tapó la bocá con la mano. El joven fue sorprendido encima de su cama, con los pantalones bajados. Ella, señaló, se encontraba entre las sábanas.

Defensa del honor familiar

El abogado defensor ha pedido la absolución del encausado por considerar que puede aplicarsele la eximente de trastorno mental transítorio y legítima defensa de honor farniliar, así como las atenuantes de arrebato y arrepentimiento espontáneo.Según el abogado defensor hay que contar con la eximente de defensa del honor porque"cualquier padre en la situación de mi defendido hubiera hecho lo mismo". Esa misma frase fue el grito unánime de toda la localidad de Miajadas, 8.698 habitantes según el último censo, que nada más conocer la historia inició un proceso de recogida de firmas solicitando la libertad del homicida, al que nadie considera " un asesino", sino "un hombre bueno y justo que hizo lo que tenía que hacer", según el testimovio de los vecinos.Algunos vecinos llegaron a afirmar que la víctima era un "delincuente" e intentaron descalificarle con el argumento de que "fumaba porros". Su padre falleció hace más de tres años aplastado por un tractor.

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