Un pastor protestante de Nueva York reparte preservativos en su parroquia para combatir el SIDA

AGENCIAS, Carl F. Titchener, pastor protestante de una parroquia del Estado de Nueva York, distribuyó preservativos para sus fieles el pasado domingo, durante los servicios eclesiásticos, con el fin de resaltar la urgencia de tomar medidas contra la propagación del síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).

"Cuando lleguemos al final de este siglo habrán muerto 100.000 personas a causa del SIDA", dijo el pastor a sus feligreses, en un discurso que tituló: El acertijo de los preservativos.

"El único sistema que tenemos para frenar la propagación de esta enfe...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

AGENCIAS, Carl F. Titchener, pastor protestante de una parroquia del Estado de Nueva York, distribuyó preservativos para sus fieles el pasado domingo, durante los servicios eclesiásticos, con el fin de resaltar la urgencia de tomar medidas contra la propagación del síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).

"Cuando lleguemos al final de este siglo habrán muerto 100.000 personas a causa del SIDA", dijo el pastor a sus feligreses, en un discurso que tituló: El acertijo de los preservativos.

"El único sistema que tenemos para frenar la propagación de esta enfermedad", aseguró Titchener, "es la abstinencia, y si esto no es posible, la utilización de preservativos".

Titchener, que es pastor de la Iglesia Unitaria Universalista, apoyó su sermón distribuyendo 125 cajas que contenían cada una tres preservativos y haciéndoles repetir la palabra condom, (preservativo) a sus feligreses, un tanto sorprendidos al principio, pero que acabaron aplaudiéndole con entusiasmo.

El pastor les obligó también a repetir en voz alta las palabras sífilis y gonorrea, para que "no tengan miedo de decirlas y se familiaricen con ellas". Titchener añadió: "Cuando las palabras no bastan, se usa un símbolo", y acto seguido descendió del púlpito y empezó a repartir los preservativos.

En revancha, una decena de manifestantes se congregó frente a la iglesia para protestar por el sermón del pastor, que, en su opinión, "favorece las relaciones sexuales y no la abstinencia". Según uno de los manifestantes, "el hecho de que las relaciones sexuales sean seguras no significa que sean morales".

Otra de los manifestantes criticó el mensaje del pastor, que resumió como que "ser promiscuo es correcto, siempre que se use un preservativo".

Archivado En