La mayoría de los católicos italianos está en contra de la energía nuclear
La mayoría absoluta de los católicos practicantes italianos se acaba de pronunciar en contra del uso de la energía nuclear. Sólo el 27% de ellos se manifiesta a favor -mientras el 52% está en contra- de que se sigan construyendo nuevas centrales nucleares. Así lo revela un sondeo llevado a cabo por el instituto Doxa, el de mayor prestigio de Italia por encargo del diario de la jerarquía eclesiástica, Avvenire.Para tener la seguridad de que quienes contestaban a la encuesta eran católicos practicantes, el muestrario fue elaborado en base a ciudadanos que acuden cada domingo y fiestas rel...
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La mayoría absoluta de los católicos practicantes italianos se acaba de pronunciar en contra del uso de la energía nuclear. Sólo el 27% de ellos se manifiesta a favor -mientras el 52% está en contra- de que se sigan construyendo nuevas centrales nucleares. Así lo revela un sondeo llevado a cabo por el instituto Doxa, el de mayor prestigio de Italia por encargo del diario de la jerarquía eclesiástica, Avvenire.Para tener la seguridad de que quienes contestaban a la encuesta eran católicos practicantes, el muestrario fue elaborado en base a ciudadanos que acuden cada domingo y fiestas religiosas a misa y reciben la comunión.
Las personas encuestadas más contrarias a es a fuente de energía son las mujeres (el 59%), seguidas por los hombres adultos (el 49%), mientras los más posibilistas y con menor recelo hacia el átomo son los jóvenes menores de 20 años.
Los católicos practicantes comunistas, por su parte, son más enemigos de la energía atómica que los católicos democristianos.
El sondeo revela además que tienen más miedo a las centrales, nucleares los católicos del Sur que los del Norte, quizás porque estos últimos están más acostumbrados a convivir con ese tipo de centrales ya que en esa zona es donde están localizadas las más importantes, como la de Caorso.
Otra de las sorpresas de la encuesta es que no son los más ricos los más favorables a la energía nuclear, sino los situados en una escala salarial intermedia, mientras se pronuncian masivamente en contra los más pobres.
Los resultados del sondeo no dejarán de impresionar y preocupar a la Democracia Cristiana, favorable a la energía nuclear, ya que su base electoral, fundamentalmente formada por católicos practicantes, manifiesta estar en contra.