La oposición acusa al Gobierno regional de que no gasta completamente su presupuesto

La Comunidad de Madrid, desde su creación, no ha logrado gastar la totalidad de su presupuesto, al haberle sobrado 8.000 millones en 1984, 20.300 en 1985 y cerca de 15.000, según las previsiones, este año, según ha denunciado Luis María Huete, portavoz del Grupo parlamentario Popular en la Comisión de Hacienda de la Asamblea de Madrid. Luis Alejandro Cendrero, vicepresidente y portavoz del Consejo de Gobierno regional, negó que sobre dinero, pues los citados remanentes corresponden a obras que al cierre de los ejercicios estaban en ejecución, pero no habían sido aún pagadas.

Los cálculo...

La Comunidad de Madrid, desde su creación, no ha logrado gastar la totalidad de su presupuesto, al haberle sobrado 8.000 millones en 1984, 20.300 en 1985 y cerca de 15.000, según las previsiones, este año, según ha denunciado Luis María Huete, portavoz del Grupo parlamentario Popular en la Comisión de Hacienda de la Asamblea de Madrid. Luis Alejandro Cendrero, vicepresidente y portavoz del Consejo de Gobierno regional, negó que sobre dinero, pues los citados remanentes corresponden a obras que al cierre de los ejercicios estaban en ejecución, pero no habían sido aún pagadas.

Los cálculos se han hecho, según Huete, con los datos facilitados al Grupo Popular en las distintas comparecencias de los responsables económicos y con las modificaciones hechas a los presupuestos anuales. "A la vista de estos resultados sólo se puede afirmar que o está mal calculado el calendario de obras o han hecho mal las previsiones de gasto", dijo Huete.El remanente de cada año, según explicó este parlamentario, se incluye en el presupuesto vigente cuando hacia el mes de abril se hace la liquidación del año anterior. "El presupuesto vigente se cambia entonces para recoger este remanente de ingresos, que va acompañado de una serie de inversiones. Luego, al final de año, vemos que de nuevo vuelve a sobrar dinero".

De acuerdo con los datos facilitados en 1984, de un presupuesto de casi 40.000 millones hubo un remanente de 8.000; en 1985, de 80.800 millones, el remanente ascendió a 20.300, y en 1986, de un presupuesto de 115.350 millones va a quedar un remanente de unos 15.000.

Manuel Corvo, portavoz de la agrupación del PCE en el Grupo Mixto, coincidió en sus críticas con Luis María Huete. "No se gasta el dinero que se presupuesta, y ello demuestra una incapacidad del equipo de gobierno para estructuar el gasto, especialmente en el tema de inversiones", dijo Corvo. El diputado comunista afirmó que es prácticamente imposible determinar cuáles son las consejerías que no gastan sus presupuestos, al existir una disposición en la ley de Presupuestos que permite al Consejo de Gobierno cambiar de consejería las partidas. "Esta disposición ha hecho que incluso hayamos pedido al resto de los grupos de la oposición la retirada global de todas las enmiendas presentadas a los presupuestos de 1987 en caso de que no se modifique esta norma".

"No sobra nada"

Luis Alejandro Cendrero, consejero regional de Economía y Hacienda, se mostró ayer sorprendido por las acusaciones de la oposición y afirmó que si bien sobran cantidades similares a las facilitadas por Huete, éstas corresponden a trabajos contratados, en ejecución, cuyo pago no ha vencido."No es dinero sobrante, pues se trata de obligaciones contraídas sobre obras que hay que pagar. El hecho de que incluyamos la obra en el presupuesto de un año aunque vaya a ser pagada en el siguiente se debe a la técnica de la Administración pública, un poco absurda, por la que no se puede adjudicar una obra si no existe la partida presupuestaria correspondiente".

"En la Comunidad, por ejemplo, tenemos varios programas plurianuales y obras que duran más del año natural. Pero ello no impide que tengamos que dotar a la partida de un presupuesto. Ese dinero queda como remanente hasta que termine la obra", declaró el consejero.

Según Cendrero, el remanente se diferencia del denominado saldo presupuestario técnico, que es el dinero que la Comunidad sí se ahorra sobre las previsiones hechas, en especial por no cubrirse todos los puestos recogidos en la plantilla de personal y por ahorros en los gastos corrientes. "En general este saldo viene a representar un 3% del presupuesto, y este ahorro se dedica a inversiones, lo que permite reducir el endeudamiento".