Uno de los palestinos juzgados en Berlín vincula a Siria con el tráfico de heroína

Faruk Salameh, uno de los dos palestinos que están siendo juzgados en Berlín Oeste por la colocación de una bomba en esta ciudad el pasado 29 de marzo, declaró el martes que negoció en Damasco, a comienzos de este año, con un alto oficial de los servicios de espionaje sirios sobre la posibilidad de realizar contrabando de heroína. Salameh explicó que fue trasladado desde el aeropuerto de Damasco en un coche oficial hasta lo que supuestamente era una oficina de los servicios de información sirios, y que, al caer enfermo, fue tratado en un hospital militar.

Salameh y el otro acusado, Ahme...

Faruk Salameh, uno de los dos palestinos que están siendo juzgados en Berlín Oeste por la colocación de una bomba en esta ciudad el pasado 29 de marzo, declaró el martes que negoció en Damasco, a comienzos de este año, con un alto oficial de los servicios de espionaje sirios sobre la posibilidad de realizar contrabando de heroína. Salameh explicó que fue trasladado desde el aeropuerto de Damasco en un coche oficial hasta lo que supuestamente era una oficina de los servicios de información sirios, y que, al caer enfermo, fue tratado en un hospital militar.

Salameh y el otro acusado, Ahmed Hasi, admitieron el lunes su responsabilidad en el atentado contra la Sociedad Germano-Árabe de Berlín Oeste, en el que resultaron gravemente heridas nueve personas. Según las declaraciones de ambos previas al juicio, la bomba utilizada en el atentado fue recogida por Hasi en la Embajada siria en Berlín Este. [Ahmed Hasi negó este último extremo el lunes ante el tribunal].El martes, Salameh afirmó de mala gana, tras ser acosado por el fiscal, que viajó a Damasco el pasado febrero a pesar de que hace 12 años se le prohibió la entrada en el país por estar involucrado en un asunto de drogas.

Salameh declaró que su compañero de viaje a Damasco, Nezar Hindawi, identificó al oficial sirio como Haitem Said o Abu Ahmed, y dijo que ocupaba el cargo de mukadam, término árabe utilizado para designar el cargo de teniente coronel. En el Ejército sirio existe un teniente coronel Hatem Said, que es subalterno del general Mohamed Joli, jefe de los servicios de espionaje de las fuerzas aéreas y consejero para la seguridad nacional del presidente Hafez el Asad.

Hindawi, hermano de Hasi, fue condenado el pasado mes por haber atentado, infructuosamente, contra un avión de la compañía aérea israelí El A1 con una bomba que escondió entre el equipaje de su novia, embarazada, y que fue detectada por los servicios de seguridad israelíes antes de que ésta embarcara en el avión en Londres. El Reino Unido decidió romper sus relaciones diplomáticas con Siria después de que en el juicio de Hindawi resultaran involucrados en el frustrado atentado los servicios de información de las fuerzas aéreas sirias y el embajador de Damasco en Londres.

En el juicio, Salameh ha intentado hacer hincapié en que Hindawi fue el único cerebro del atentado en Berlín Oeste. Sin embargo, en la declaración efectuada antes del juicio, él mismo afirmó que el oficial sirio le adiestró para utilizar la bomba de plástico, después de que Salameh le pidiera heroína para vender luego en Berlín. Según esta declaración, el coronel sirio contestó a la petición de droga de Salameh: "Todo a su debido tiempo."