Extirpado el bazo al joven Vicente Paniagua, que fue sometido el sábado en Madrid a un trasplante de hígado

Vicente Paniagua Simón, de 17 años, a quien se practicó el pasado sábado un trasplante de hígado en Madrid, fue sometido en la madrugada de ayer a una nueva intervención para extirparle el bazo. El joven está bajo respiración asistida y su situación hemodinámica es positiva, según Enrique Moreno, jefe del Servicio de Cirugía de Aparato Digestivo II del hospital Primero de Octubre. El paciente, instalado en la unidad de cuidados intensivos, recupera sus funciones hepáticas y renales. En contra de informaciones difundidas en la madrugada del lunes, el joven no fue sometido a un segundo trasplant...

Vicente Paniagua Simón, de 17 años, a quien se practicó el pasado sábado un trasplante de hígado en Madrid, fue sometido en la madrugada de ayer a una nueva intervención para extirparle el bazo. El joven está bajo respiración asistida y su situación hemodinámica es positiva, según Enrique Moreno, jefe del Servicio de Cirugía de Aparato Digestivo II del hospital Primero de Octubre. El paciente, instalado en la unidad de cuidados intensivos, recupera sus funciones hepáticas y renales. En contra de informaciones difundidas en la madrugada del lunes, el joven no fue sometido a un segundo trasplante de hígado.

El doctor Moreno, director del equipo que realizó la intervención, explicó ayer que, tras la operación del sábado no hubo rechazo al órgano trasplantado, sino una mala función inmediata, motivada por el bazo patológico y de grandes dimensiones que tenía el paciente y que le ocupaba la mitad de la parte izquierda del abdomen.Según Enrique Moreno, el hígado que se trasplantó a Vicente Paniagua, que estaba aquejado de una cirrosis hepática, fue implantado bien, por lo que no fue necesario realizar un nuevo trasplante. Pero el pasado domingo se observaron en el paciente signos de hemorragia abdominal. Ante la posibilidad de que la causa fuera una función precaria del órgano trasplantado, y tras haber aplicado medidas de tratamiento conservado, se optó por revisar la operación.

La revisión implicaba la conveniencia de disponer de otro segundo órgano. Este nuevo hígado, que al final no se utilizó, se obtuvo en la ciudad sanitaria Carlos Haya de Málaga en la tarde del lunes. El equipo madrileño se trasladó a ese hospital y realizó la extracción con el equipo de urología de aquel centro.

Al comprobar que había un rechazo del hígado, los médicos decidieron extirpar el bazo, operación que, pese a su peligro, era necesaria para que el hígado siguiera funcionando correctamente.

Pedro García Fernández, director gerente del Primero de Octubre, confirmó que en el Hospital del Aire de Madrid se halló otro donante, aunque este último órgano hepático no era de las dimensiones apropiadas.

Según el doctor Moreno, en el hospital Primero de Octubre hay actualmente 11 personas a la espera de un trasplante de hígado.