La Comisión estudia 18 posibles infracciones de las reglas comunitarias por parte de España

La Comisión Europea está examinando 18 posibles infracciones de las reglas comunitarias por parte de España. La mayoría de los asuntos cae bajo la categoría de "casos descubiertos de oficio" y no son simples quejas (sólo hay tres en esta última categoría). El fallo de la Comisión puede tener importantes consecuencias para algunos sectores españoles, indicaron fuentes españolas.

La mayoría de las quejas se refiere a normas publicadas sobre diversas materias en el BOE para crear barreras no arancelarias a la importación. En España, con vistas a la adhesión, ha habido 35 decretos de armoni...

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La Comisión Europea está examinando 18 posibles infracciones de las reglas comunitarias por parte de España. La mayoría de los asuntos cae bajo la categoría de "casos descubiertos de oficio" y no son simples quejas (sólo hay tres en esta última categoría). El fallo de la Comisión puede tener importantes consecuencias para algunos sectores españoles, indicaron fuentes españolas.

La mayoría de las quejas se refiere a normas publicadas sobre diversas materias en el BOE para crear barreras no arancelarias a la importación. En España, con vistas a la adhesión, ha habido 35 decretos de armonización. Este tipo de protección lo aplican otros países. De hecho, si hay 18 posibles infracciones españolas, el informe de la Comisión incluye unos cinco centenares de infracciones por parte de otros países de la Comunidad Europea (CE)."Si queremos hacer trampas, está muy bien, todo el mundo lo hace. Pero lo que no hay que hacer es utilizar al BOE para esto", comentó una fuente española. No obstante, las posibles infracciones afectan a sectores económicamente débiles frente a las importaciones comunitarias. Y la Comisión, indicaron fuentes próximas a esta institución, probablemente aceptará como válida la mayor parte de las quejas contra España. Pero la solución de algunas de estas quejas contra otros países favorece en algunos casos a los intereses españoles.

La primera queja, presentada a través de una pregunta escrita a la Comisión por el eurodiputado conservador británico Basil de Ferranti, se refiere a la importación de equipos de ordenadores. La nueva normativa española prohíbe la importación de material no homologado por las autoridades españolas según una serie de normas (como, por ejemplo, la inclusión de la ñ). Éste es un caso conocido, pues salió ya a la luz pública.

La queja siguiente (presentada por la Confederación Europea de Industrias del Calzado) se refiere a las reglas de etiquetaje del calzado (BOE del 8 de marzo de 1985); según la cual, en Españá las etiquetas han de venir escritas en la lengua nacional, contener el origen del material, indicar el tipo de papel del etiquetado y la especie animal de la piel. Queja similar sobre "dificultades a la importación de calzado en España" ha sido presentada por Italia.

Un español, Caparrós Martínez, de Barcelona, es el que ha presentado la queja contra las normas de importación en España del aguardiente de malta para la producción de whisky.

El Consejo Nacional del Patronato Francés ha presentado una queja contra el sistema de homologación en España de artículos en acero inoxidable para la mesa. El decreto español en cuestión (de 8 de noviembre de 1985) implica que las nuevas normas entrarán en vigor el 18 de agosto. La queja se basa sobre la no entrada en España de los productos no homologados y la lentitud del procedimiento de homologación. Queja similar es la de Cofindustria, italiana, sobre las normas de importación en España de cubiertos y grifería. En esta materia, otra queja sobre grifería considera demasiado complicado el sistema de homologación contemplado en el decreto español (del 15 de abril de 1986).

Trabas a la exportación

Dos quejas tienen que ver con la agricultura, una sobre las trabas a la exportación de vinos aromatizados debido al contenido de los embalajes y otra sobre las latas en hierro blanco en contacto con los alimentos.

La queja de la Agrupación de Industrias Francesa de Aparatos y Equipos Domésticos está dirigida contra las normas sobre las cocinas por combustible sólido. El Consejo Europeo de Constructores de Electrodomésticos, por una parte, y la RFA, por otra, han presentado sendas quejas generales contra la puesta en aplicación obligatoria en España de normas de seguridad en los electrodomésticos, al considerar que dichas normas van en contra de la directiva comunitaria sobre baja tensión. Lo mismo opinó, al presentar su queja, la Verband Deutscher Machinen un Anlagenban sobre las normas de seguridad españo las para los ordenadores.

Fribord Comestic, de Baden Baden (RFA), ha protestado contra las limitaciones a la importación de productos cosméticos en España. Las normas españolas obligan a registrar el producto -de venta libre en los diez- ante el Ministerio español de Sanidad. También hay una queja contra la tasa de presentación en aduana de paquetes postales la queja también va dirigida a Irlanda y Portugal y el tema está siendo debatido en el Consejo de Ministros de la CE), y otra de carácter general contra las reglas de importación de productos industriales en España.

El Colegio de Comisarios ha aplazado momentáneamente sus discusiones sobre estas posibles infracciones a la espera de los contactos que están teniendo lugar, en lo que a industria se refiere, entre la Administración española y la Dirección General de Mercado Interior y Asuntos Industriales de la Comisión, encabezada por Fernand Braun. Otros contactos han tenido o tendrán lugar para otros sectores. Las listas sí han sido debatidas entre los jefes de gabinete de los comisarios., España ha pedido examinar las quejas con la Comisión.

La Comisión intenta que los Estados miembros que han cometido las infracciones cambien su legislación o normativa después de que el Colegio de Comisarios les entregue un dictamen. Si el Estado miembro se resiste a cambiar su normativa, la Comisión suele llevar el tema al Tribunal de Justicia Europeo para que éste, a través de una sentencia, obligue al cambio.

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