EE UU amenaza a la CE por la supresión de sus ventas agrícolas a España y Portugal

El Gobierno de Estados Unidos decidió ayer adoptar medidas de represalia contra la CE en función de las restricciones impuestas a sus exportaciones agrícolas a España y Portugal, tras la incorporación de ambos países a la Comunidad Económica Europea. La Casa Blanca anunció que impondría cuotas y derechos de aduana para un determinado número de importaciones agrícolas procedentes de países miembros de la CE para compensar los perjuicios sufridos por EE UU desde el pasado 1 de marzo, sobre todo en lo referente a las exportaciones de soja y otros cereales, evaluados en torno a los 1.000 millo...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Gobierno de Estados Unidos decidió ayer adoptar medidas de represalia contra la CE en función de las restricciones impuestas a sus exportaciones agrícolas a España y Portugal, tras la incorporación de ambos países a la Comunidad Económica Europea. La Casa Blanca anunció que impondría cuotas y derechos de aduana para un determinado número de importaciones agrícolas procedentes de países miembros de la CE para compensar los perjuicios sufridos por EE UU desde el pasado 1 de marzo, sobre todo en lo referente a las exportaciones de soja y otros cereales, evaluados en torno a los 1.000 millones de dólares, unos 142.000 millones de pesetas.

Las nuevas medidas entrarían en vigor en el plazo de unos 30 días, siempre y cuando la CE no anule sus actuales posturas restrictivas. No obstante, las mismas fuentes de la Casa Blanca rehusaron precisar cuáles serían los productos que sufrirían dichas represalias, aunque aseguraron que la lista se conocería en el transcurso de la presente semana.

La pasada semana, el consejo de política económica, un organismo intergubemamental, recomendó la adopción de represalias contra la CE si esta no acaba con las cuotas sobre la soja, que aplica Portugal, o compensa a Estados Unidos por las tarifas que desde el pasado 1 de marzo puede imponer España a las importaciones de cereales. España ha estado comprando durante los últimos cinco años una media de 3,5 millones de toneladas de grano norteamericano y este año esta cantidad puede descender a menos de dos millones de toneladas, la cifra más baja desde 1972, informa el Ministerio norteamericano de Agricultura. La CE ha impuesto una tarifa especial sobre las importaciones de cereales españolas para que no puedan ser reexportados a otros países de la Comunidad.

Guerra comercial

La Casa Blanca cree que esta es una cuestión importante que puede aumentar las fricciones comerciales entre Estados Unidos y Europa y que debe ser resuelta inmediatamente. La Administración piensa en eventuales represalias contra las exportaciones comunitarias de vino y queso. El representante especial para el comercio del presidente, Clayton Yeutter, ha insistido en que no se responda contra las aceitunas españolas o las sardinas portuguesas, sino contra los productos agrícolas europeos en general.La posición norteamericana refleja la frustración del Gobierno por la continua pérdida de mercados para los productos agrícolas norteamericanos. El secretario de Estado, George Schultz, advirtió la semana pasada en París al Gobierno francés del problema de las restricciones de España y Portugal a los productos agrícolas de EE UU, utilizando la cifra de 1.000 millones de dólares de pérdidas de ventas. La Administración considera necesaria una advertencia formal, aunque se confia en que esta disputa comercial se resolverá mediante la negociación.

Archivado En