El triunfo del 'sí' ayudará a evitar las elecciones generales en junio

El triunfo del sí en el referéndum tiene como consecuencia más inmediata, desde el punto de vista de la política interna, la confirmación de la hipótesis de que las elecciones legislativas no se producirán probablemente hasta octubre o noviembre, agotándose así la legislatura, conforme a los deseos expresados varias veces por Felipe González.El escaso margen de victoria del Gobierno y el desgaste sufrido por los socialistas durante la campaña son factores que hacen que al Gobierno le sea imprescindible dejar pasar algún tiempo para "restañar heridas", en frase de un miembro de la ejecutiva del...

El triunfo del sí en el referéndum tiene como consecuencia más inmediata, desde el punto de vista de la política interna, la confirmación de la hipótesis de que las elecciones legislativas no se producirán probablemente hasta octubre o noviembre, agotándose así la legislatura, conforme a los deseos expresados varias veces por Felipe González.El escaso margen de victoria del Gobierno y el desgaste sufrido por los socialistas durante la campaña son factores que hacen que al Gobierno le sea imprescindible dejar pasar algún tiempo para "restañar heridas", en frase de un miembro de la ejecutiva del PSOE.

Las manifestaciones de algunos políticos de la oposición, como el portavoz de Minoría Catalana e inspirador de la operación reformista, Miquel Roca, en el sentido de que un resultado similar al obtenido hoy haría "perder representatividad al Parlamento" (que votó sí a la OTAN por más del 90%), y ello, por tanto, aconsejaría una pronta disolución de la Cámaras, no parece que vayan a ser atendidas por Felipe González. Distintas fuentes gubernamentales han insistido en la "conveniencia" de completar la legislatura, tratando de evitar la anticipación de las elecciones legislativas para junio. Solamente la victoria del no en el referéndum hubiese aconsejado tal anticipación, haciendo coincidir las elecciones generales con las autonómicas andaluzas del 22 de junio. La esperanzadora situación de la coyuntura económica internacional es uno de los datos que hacen confiar al Gobierno presidido por Felipe González en que para el otoño la opinión pública habrá olvidado una campaña que el PSOE admite que ha sido "desgastante" para sus líderes.

Diálogo Gobierno-oposición

La recomposición del diálogo entre Gobierno y oposición popular, al menos en materia de política exterior, será otra de las consecuencias del resultado del referéndum. La escasa abstención -parte de ella meramente técnica- registrada en la votación de hoy constituye un resultado indudablemente descorazonador para Coalición Popular, que deberá ahora ofrecer una imagen más constructiva, según admitió un vicepresidente de Alianza Popular. Tanto González como Manuel Fraga han ofrecido públicamente, en los últimos días, un "diálogo tras el referéndum" a la otra parte, si bien fuentes de Coalición Popular no han dejado de expresar sus "temores" de que una victoria gubernamental en el referéndum pudiese traducirse "en un aumento de la prepotencia con que ya actúan los socialistas".La prolongación de la legislatura hasta después del verano hace pensar en un papel secundario del Parlamento en los próximos meses, dada la escasez de proyectos legislativos por debatir. Tan sólo la regulación de la televisión privada -que el viernes puede recibir luz verde en el Consejo de Ministros- y acaso las normas electorales para el Parlamento Europeo -en el caso de que el Gobierno no decida aplazar las elecciones para los eurodiputados hasta el año próximo- animarán algo el debate parlamentario.