Graves dificultades en las negociaciones entre Generalitat y Trabajo sobre empleo

La Generalitat de Cataluña y el Ministerio de Trabajo mantienen discretas negociaciones desde principios del verano para tratar de coordinar los diversos fondos paralelos en materia de fomento del empleo. La desconexión presupuestaria en estas cuestiones ha Negado a constituir un auténtico laberinto administrativo para empresas, trabajadores, sindicatos y municipios catalanes, según coinciden en subrayar tanto las centrales mayoritarias como las dos asociaciones de municipios.

Sin embargo, después de rechazar una primera propuesta de la Generalitat sobre el Fondo de Solidaridad del AES,...

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La Generalitat de Cataluña y el Ministerio de Trabajo mantienen discretas negociaciones desde principios del verano para tratar de coordinar los diversos fondos paralelos en materia de fomento del empleo. La desconexión presupuestaria en estas cuestiones ha Negado a constituir un auténtico laberinto administrativo para empresas, trabajadores, sindicatos y municipios catalanes, según coinciden en subrayar tanto las centrales mayoritarias como las dos asociaciones de municipios.

Sin embargo, después de rechazar una primera propuesta de la Generalitat sobre el Fondo de Solidaridad del AES, el Ministerio de Trabajo ha formulado a la Generalitat y a otras comunidades autónomas por vez primera un intento de coordinación sobre empleo, cuyos criterios han sido considerados inaceptables por diversos sectores sindicales y políticos de Cataluña. El conseller de Trabajo de la Generalitat, Oriol Badia, remitió a Joaquina Almunia un primer convenio para aplicar en Cataluña los Fondos de Solidaridad del AES a finales de la pasada primavera. El convenio, que solicitaba un total de 3.600 millones -cifra ligeramente inferior que la suscrita entre Fomento del Trabajo y UGT de Cataluña en julio- debía aplicarse a la inversión para crear puestos de trabajo preferentemente estables y al empleo juvenil, no ha llegado a materializarse. Paralelamente, la Generalitat agotó en junio sus propios fondos para fomentar en Cataluña los contratos en prácticas, una partida añadida a última hora en este ejercicio, procedente del anterior presupuesto.En contrapartida, el documento elaborado por el Ministerio de Trabajo, forma parte de un intento de aproximación en materia de empleo a todas las comunidades autónomicas e introduce temas relativos al Instituto Nacional de Empleo -última espina en las transferencias laborales-, al Fondo de Solidaridad y al Plan Nacional de Formación e Inserción Profesional. La aportación económica del ministerio, lejos de alcanzar las cifras barajadas por la Generalitat, establece un total de 93 millones de pesetas para la realización de obras a cargo de la Generalitat en colaboración con el Inem.

La Federación de Municipios de Cataluña invitó en agosto pasado a la Generalitat y al Inem a "elaborar conjuntamente las modalidades organizativas y administrativas apropíadas, contando con la colaboración de los municipios y las organizaciones socioeconómicas de Cataluña". Fuentes de los socialistas catalanes, calificaron de insuficiente el documento elaborado por Trabajo e insistieron en la necesaria colaboración en materia de empleo.

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