Limitación de 1.000 coches diarios en La Pedriza y cierre del paso en Charca Verde

El Patronato del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares ha decidido limitar el acceso de personas a la zona de La Pedriza, a partir del próximo día 10, donde sólo se admitirá la entrada de 1.000 vehículos por la barrera de La Camorza, y cerrar el paso motorizado en el paraje denominado Charca Verde, desde el próximo sábado día 3, para evitar el deterioro ecológico y riesgos humanos, según informó ayer Luis Maestre, consejero de Agricultura y Ganadería de la Comunidad de Madrid."El excesivo número de personas que acuden a estos lugares, especialmente en los fines de semana, pone en pe...

El Patronato del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares ha decidido limitar el acceso de personas a la zona de La Pedriza, a partir del próximo día 10, donde sólo se admitirá la entrada de 1.000 vehículos por la barrera de La Camorza, y cerrar el paso motorizado en el paraje denominado Charca Verde, desde el próximo sábado día 3, para evitar el deterioro ecológico y riesgos humanos, según informó ayer Luis Maestre, consejero de Agricultura y Ganadería de la Comunidad de Madrid."El excesivo número de personas que acuden a estos lugares, especialmente en los fines de semana, pone en peligro la vida de los visitantes, como ocurrió en la noche del pasado día 25 al producirse un incendio en el Risco del Pájaro por imprudencia de algunas personas", dijo Maestre. "A veces, los vehículos han llegado a bloquear las pistas forestales", añadió.

El citado patronato recuerda la prohibición de hacer fuego y la necesidad de la colaboración ciudadana en el mantenimiento de la limpieza del lugar. El patronato adoptó unánimemente la decisión de limitación y cierre antes mencionada y elaborará un plan de medidas urgentes antes del próximo mes de febrero, según Luis Maestre.

En lo que va de verano se han producido ya 429 pequeños incendios, de muy poca importancia, que han afectado a unas 20 hectáreas de matorral y rastrojo.

Por otra parte, el consejero informó que 2.000 hectáreas de pinar en este parque, muy afectadas por la oruga procesionaria, serán fumigadas desde el aire con un insecticida -el dimelín- en este año, aunque se pretende sustituir este método por otro biológico -el de las feromonas sexuales, que atraen y destruyen a los machos de dicha oruga-, para no dañar el ecosistema.