EDUCACIÓN

Un maestro, despedido en Las Palmas por no rezar diariamente en clase

Carlos Juan Álamo Palmés, maestro del colegio Saucillo de la Isleta, en Las Palmas de Gran Canaria, ha sido despedido de su puesto de trabajo por no rezar diariamente en clase, según consta en la carta de despido. El director del centro, Miguel Pérez Arbelo, explicó así la causa de la baja: "Somos personas incompatibles y creo que debe dejar el puesto a otro en bien del centro".

CRISTÓBAL PEÑATE, Carlos Juan Álamo, soltero de 33 años, lleva trabajando como maestro del colegio privado Saucillo desde el año 1977, cuando terminó la carrera de Magisterio en la escuela de Las Palmas. "Me...

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Carlos Juan Álamo Palmés, maestro del colegio Saucillo de la Isleta, en Las Palmas de Gran Canaria, ha sido despedido de su puesto de trabajo por no rezar diariamente en clase, según consta en la carta de despido. El director del centro, Miguel Pérez Arbelo, explicó así la causa de la baja: "Somos personas incompatibles y creo que debe dejar el puesto a otro en bien del centro".

CRISTÓBAL PEÑATE, Carlos Juan Álamo, soltero de 33 años, lleva trabajando como maestro del colegio privado Saucillo desde el año 1977, cuando terminó la carrera de Magisterio en la escuela de Las Palmas. "Me contrataron", señala el profesor despedido, "de manera temporal por varios cursos hasta que en 1981 me hicieron fijo".En la carta de despido, el director del centro señala: "Por medio de la presente le hago saber que he tomado la determinación de despedirle (...) por las causas siguientes: primera, en este centro se tiene como norma interior, desde su fundación, el hacer rezar diariamente a los niños al finalizar las clases, y usted desde hace tres meses se niega a cumplir dicha norma, y cuando se le piden explicaciones usted contesta que se ha olvidado".

La carta se complementa con tres puntos más que hacen referencia a "una práctica total de obstruccionismo a las normas interiores del centro". Carlos Juan Álamo negó las causas de despido contenidas en la carta y señaló: "Yo he rezado con los niños de mi clase desde que comencé a trabajar, sólo que a veces se venía la hora encima y no rezábamos, pero puedo asegurar que en los tres últimos meses lo hemos hecho casi siempre".

El profesor despedido ha dado clases de religión en el centro durante todo el curso. Sin embargo, se declaró católico no practicante y señaló que nunca había recibido quejas ni de la dirección ni de los padres por este motivo.

La reciente sentencia del Tribunal Constitucional sobre la LODE reafirma el derecho de los centros privados a establecer su ideario o carácter propio, que impide al profesor "dirigir ataques abiertos o solapados contra ese ideario", pero que tampoco le obliga "a convertirse en apologista del mismo, ni a transformar su enseñanza en propaganda o adoctrinarniento".

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