Dos años de autonomía

Los recursos económicos crecen con mayor rapidez que el número de funcionarios

El número de empleados de la Comunidad de Madrid ascendía a 9.642 personas a 31 de diciembre de 1983, cuando la recién constituida región no había recibido ninguna transferencia importante. De esos empleados, 2.167 eran funcionarios; y 7.475, contratados. Procedían de la extinguida Diputación, cuyo presupuesto anual no excedía de los 36.000 millones. Los recursos económicos han crecido con mayor rapidez.El 31 de diciembre de 1984, la cifra de empleados de la comunidad era ya de 15.256. Los 5.614 funcionarios nuevos fueron transferidos a la administración autónoma al mismo tiempo que los servic...

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El número de empleados de la Comunidad de Madrid ascendía a 9.642 personas a 31 de diciembre de 1983, cuando la recién constituida región no había recibido ninguna transferencia importante. De esos empleados, 2.167 eran funcionarios; y 7.475, contratados. Procedían de la extinguida Diputación, cuyo presupuesto anual no excedía de los 36.000 millones. Los recursos económicos han crecido con mayor rapidez.El 31 de diciembre de 1984, la cifra de empleados de la comunidad era ya de 15.256. Los 5.614 funcionarios nuevos fueron transferidos a la administración autónoma al mismo tiempo que los servicios a los que estaban asignados. Actualmente, el número de empleados es de 16.912 personas, y, para fin de año, cuando se hayan recibido las últimas transferencias, ascenderá a unos 20.000.

Más información

El presupuesto ha crecido aún más, lo que permitirá a la comunidad invertir, según sus responsables. En 1984 era de 41.283 millones, apenas el de una Diputación Provincial ampliada. En 1985 supone 93.995 millones, algo más del doble. Los recursos financieros casi se han triplicado en estos dos años, mientras que el número de funcionarios ha experimentado crecimiento menor.

Joaquín Leguina ya advirtió, en su discurso de investidura, que la comunidad debía basar su administración en el principio de austeridad y que no admitiría más traspasos de funcionarios que los imprescindibles.

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