La empresa Montesa despide al 67% de su plantilla

La Dirección General de Trabajo aprobó el pasado día 21 de junio la rescisión del contrato de 286 trabajadores de la empresa de motocicletas Montesa de Esplugues (Baix Llobregat). Esta resolución supone el despido del 67% del total de la plantilla formada por 438 personas. El sindicato Comisiones Obreras ha denunciado el incumplimiento "del compromiso personal del ministro de Industria, Carlos Solchaga, de efectuar el plan de reconversión en el sector de la motocicleta". Este incumplimiento ha provocado, en opinión de CC OO, el cierre de las empresas Bultaco y OSSA y la pérdida de más de 500 p...

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La Dirección General de Trabajo aprobó el pasado día 21 de junio la rescisión del contrato de 286 trabajadores de la empresa de motocicletas Montesa de Esplugues (Baix Llobregat). Esta resolución supone el despido del 67% del total de la plantilla formada por 438 personas. El sindicato Comisiones Obreras ha denunciado el incumplimiento "del compromiso personal del ministro de Industria, Carlos Solchaga, de efectuar el plan de reconversión en el sector de la motocicleta". Este incumplimiento ha provocado, en opinión de CC OO, el cierre de las empresas Bultaco y OSSA y la pérdida de más de 500 puestos de trabajo.Según CC OO, el tratamiento dado por el Gobierno al subsector de la motocicleta de montaña "responde a una política económica que favorece a los intereses de las empresas multinacionales". La Cormisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos aprobó el pasado día 17 de junio una ayuda de 500 millones de pesetas para este subsector, de los que 225 millones serán destinados a Montesa. CC OO señala que "con esta concesión se ha puesto en marcha el mecanismo que condicionaba la aprobación del expediente de rescisión de los 286 contratos de trabajo a la subvención del ministerio de Industria". Además, considera de "urgente necesidad" la clarificación de las vías de financiación de Montesa, para que se pueda continuar con la actividad industrial, pago de salarios -y materia prima, a través de un crédito o aportación de capital.

La crisis de Montesa se puso de manifiesto al presentar una suspensión de pagos en octubre de 1983. En la memoria se acreditaba un activo de 997 millones de pesetas y un pasivo de 731 millones.

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