EE UU y la URSS reanudan el diálogo comercial interrumpido en el año 1978
El Departamento norteamericano de Comercio ha vencido en la última escaramuza de la larga guerra que mantiene con el Pentágono en torno a qué agencia gubernamental debe regular el comercio con la Unión Soviética. A pesar de la fuerte oposición del secretario de Defensa, Caspar Weinberger, su colega de Comercio, Malcolm Baldrige, viajará a Moscú la próxima semana para celebrar las primeras conversaciones comerciales bilaterales que tienen lugar entre las dos superpotencias desde el año 1978.Weinberger había urgido al Departamento de Comercio a postergar las conversaciones como señal de protesta...
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El Departamento norteamericano de Comercio ha vencido en la última escaramuza de la larga guerra que mantiene con el Pentágono en torno a qué agencia gubernamental debe regular el comercio con la Unión Soviética. A pesar de la fuerte oposición del secretario de Defensa, Caspar Weinberger, su colega de Comercio, Malcolm Baldrige, viajará a Moscú la próxima semana para celebrar las primeras conversaciones comerciales bilaterales que tienen lugar entre las dos superpotencias desde el año 1978.Weinberger había urgido al Departamento de Comercio a postergar las conversaciones como señal de protesta por la muerte, el mes pasado, de un oficial norteamericano en Berlín Este y la negativa de Moscú a comprometerse a no abrir fuego sobre el personal asignado a la misión norteamericana en la capital berlinesa. Weinberger se opone con todas sus fuerzas a la posible transferencia a la URSS de tecnología básica norteamericana. Sobre este tema, sin embargo, el secretario de Defensa parece haberse salido con la suya: el Consejo de Seguridad Nacional, que no tiene nada que ver con Comercio, ha sido el autor de la agenda para la reunión de Moscú.
Fuentes de la Administración han manifestado que las conversaciones de Moscú no versarán sobre equipo y material estratégico, estando centradas sobre el comercio de bienes de consumo, pulpa y pasta de papel, así como en el otorgamiento de facilidades para los hombres de negocios norteamericanos en la Unión Soviética.