El Grupo Popular coincide con el PSOE en varias enmiendas a la ley del aborto
El Grupo Popular del Congreso admite la posibilidad de interrumpir el embarazo en los casos de grave peligro para la vida de la embarazada, violación o malformación del feto. La diferencia fundamental con las enmiendas de los socialistas estriba en que el grupo que apoya al Gobierno incluye, además del peligro físico, el psíquico. Los parlamentarios del PCE añaden la circunstancia de la presión social como causa justificable del aborto.
Todos los grupos parlamentarios presentaron ayer en el Congreso las enmiendas a la ley del aborto. Las 25 enmiendas redactadas serán objeto de examen el...
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El Grupo Popular del Congreso admite la posibilidad de interrumpir el embarazo en los casos de grave peligro para la vida de la embarazada, violación o malformación del feto. La diferencia fundamental con las enmiendas de los socialistas estriba en que el grupo que apoya al Gobierno incluye, además del peligro físico, el psíquico. Los parlamentarios del PCE añaden la circunstancia de la presión social como causa justificable del aborto.
Todos los grupos parlamentarios presentaron ayer en el Congreso las enmiendas a la ley del aborto. Las 25 enmiendas redactadas serán objeto de examen el próximo lunes por la Mesa del Congreso, que tiene que velar por que el contenido de las mismas se ajuste al cumplimiento de la sentencia del Tribunal Constitucional y no rebasen sus indicaciones.Con el lote de enmiendas, el Grupo Popular ha presentado dos proposiciones de ley, denominadas de protección de la vida concebida y del derecho a la objeción de conciencia de los médicos en relación con los supuestos de despenalización del aborto. Este grupo, a través de su proposición sobre protección a la vida, insta a la creación de una comisión, denominada de Defensa de la Vida. Entre otros objetivos, tendrá como labor la de controlar que, en la aplicación de las indicaciones para la. despenalización del aborto, se garantice eficazmente la protección a la vida concebida y a la salud y dignidad de la mujer.
El Grupo Socialista presentó el pasado martes cuatro enmiendas a la ley que despenaliza el aborto, como ya había señalado este periódico, entre las que destaca la posibilidad de abortar para evitar un grave peligro para la salud física o psíquica de la embarazada y que en el supuesto de urgencia por riesgo vital para la gestante podrá prescindirse del dictamen y del consentimiento expreso. Los diputados comunistas, con una sola enmienda, van más allá y añaden como circunstancia para abortar el perjuicio social de la embarazada. El PCE presenta además una proposición de ley sobre interrupción voluntaria del embarazo muy permisiva.
Garantías extremas
El Grupo Popular, a través de sus ocho enmiendas, extrema las garantías jurídicas que pedía la sentencia del Tribunal Constitucional e incluye enfáticamente la obligatoriedad de asesoramiento a la embarazada con el objetivo de disuadirla de su deseo de abortar. "En todos los casos, la embarazada debe haber sido previamente asesorada sobre las ayudas públicas y privadas que facilitarían la continuación del embarazo y las facilidades posteriores para la madre y el hijo", dice una de las enmiendas.
Los nacionalistas catalanes presentan cinco enmiendas, tres de carácter técnico, que asume todo el grupo, y las dos coincidentes con el Grupo Popular, que avala el diputado de Unió Democràtica de Catalunya Joaquím Xicoy. El Grupo Centrista presentó ayer cuatro enmiendas, que, con las tres del PNV y las otras 18, serán revisadas el lunes por los miembros de la Mesa del Congreso.