Destinos forzosos para dos comandantes. condenados por el 23-F

Los comandantes de la Guardia Civil Carlos Lázaro Corthay y Enrique Bobis González, ambos condenados a tres años de prisión por su participación en el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981, han sido destinados forzosamente a Logroño y Vitoria, según unas órdenes ministeriales que ayer publicó el Boletín Oficial del Ministerio de Defensa.A los dos militares, que ya han cumplido sus condenas, les ha sido aplicado el artículo 55 del Reglamento de Provisión de Vacantes, que faculta al ministro de Defensa a fijar destinos forzosos. Ambos han sido destinados a las planas mayor...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Los comandantes de la Guardia Civil Carlos Lázaro Corthay y Enrique Bobis González, ambos condenados a tres años de prisión por su participación en el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981, han sido destinados forzosamente a Logroño y Vitoria, según unas órdenes ministeriales que ayer publicó el Boletín Oficial del Ministerio de Defensa.A los dos militares, que ya han cumplido sus condenas, les ha sido aplicado el artículo 55 del Reglamento de Provisión de Vacantes, que faculta al ministro de Defensa a fijar destinos forzosos. Ambos han sido destinados a las planas mayores de las respectivas comandancias.

Lázaro Corthay estaba destinado hasta ahora en Lugo, aunque en situación de agregado, ya que ascendió recientemente a comandante y en Lugo no existía vacante de este empleo. En la misma situación, aunque en Zamora, se encontraba Enrique Bobis. Los dos eran capitanes cuando el 23 de febrero de 1981 participaron en la ocupación del Congreso de los Diputados.

Tanto Lázaro Corthay como Bobis González no fueron obligados a abandonar su situación activa en las Fuerzas Armadas porque las penas con las que fueron condenados no alcanzaron los tres años y un día.

De los 30 militares que resultaron condenados por su participación en el 23-F ya han ascendido siete.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En