La Administracion estima que los precios de mercado de los productos agrarios aumentarán por encima del 7,5% en 1985

Las conversaciones para la fijación de los nuevos precios de los productos agrarios sujetos a regulación de campaña terminaron ayer con un acuerdo completo de la Administración y la COAG y la UPA-FTT y con acuerdos parciales con UFADE y Jóvenes Agri cultores.La Administración aumentó ligeramente la oferta de subida de los precios de garantía de los productos agrarios sujetos a regulación de campaña y estable ció cuáles van a ser las oscilacio nes de precios que pueden darse en el mercado a lo largo de 1985.Julián Arévalo, presidente del FORPPA, elevó ayer en 0,5 puntos la subida media de los p...

Las conversaciones para la fijación de los nuevos precios de los productos agrarios sujetos a regulación de campaña terminaron ayer con un acuerdo completo de la Administración y la COAG y la UPA-FTT y con acuerdos parciales con UFADE y Jóvenes Agri cultores.La Administración aumentó ligeramente la oferta de subida de los precios de garantía de los productos agrarios sujetos a regulación de campaña y estable ció cuáles van a ser las oscilacio nes de precios que pueden darse en el mercado a lo largo de 1985.Julián Arévalo, presidente del FORPPA, elevó ayer en 0,5 puntos la subida media de los precios de garantía de los productos agrarios, hasta situarla en el 4,6%, dos puntos y medio por debajo de la inflación prevista por la Administración para 1985. La novedad de la reunión celebrada ayer fue la es timación del FORPPA sobre el comportamiento de los precios de mercado para el año actual y la banda de comercialización -verdadero eje de rentas del sector agrario en los países comunitarios- que establece la diferencia entre los precios estimados de mercado y los de garantía fijados por la Administración.

Los precios indicativos -la opinión sobre por dónde se va a mover el mercado a lo largo de 1985- establecen una subida media del 7% para los cereales y del 8,5% para los productos ganaderos. Según estas previsiones, a las que se suele ajustar el mercado dada la capacidad de intervención que tiene el FORPPA para impedir fuertes desviaciones en los precios de mercado, el precio real del maiz subirá el 6,4%; el del trigo el 6%, 8,12% la cebada, 8,30% la avena y 8% el centeno. El sorgo se incrementará un 4,35%.

Ello significa una subida media de los cereales del 7%, que equiva le a la inflación prevista para 1985 según el Gobierno. La diferencia entre el precio de garantía y el de mercado estimado para los cereales crece en un 25% sobre la existente el año pasado, lo que abre mucho las distintas posibilidades de actuación de los agricultores.

La estrecha relación entre los precios reales de los cereales y la estructura de los de determinados productos ganaderos justifica que el FORPPA haya estimado que los precios de mercado de la carne de vacuno se elevarán en el 8,23% y la de porcino en el 8,76%. El precio de la leche aumentará un 4,76%. La subida media superará el 8,50% y las bandas de cornercialización serán superiores al 20% en el porcino y al 33% en el vacuno.

Aumentar el excedente

En medios de las Administración se estima que las nuevas propuestas de precios de garantía y de costes del sector generará en la próxima campaña un importante excedente de rentas a los agricultores y ganaderos. En este sentido se señala que en la actual campaña los precios de garantía han crecido en el 6,7% mientras que en la que se trata ahora de regular estarán en tomo al 4,6%, lo que significa un descenso de poco más de dos puntos. Por el contrario el descenso en la elevación de costes de fuera del sector necesarios para llevar a cabo la producción agraria va a pasar del 11% de esta campaña al 7% para 1985/86, con un descenso de cuatro puntos.Por su parte tres organizaciones agrarias -Jóvenes Agricultores, Confederación Nacional de Agricultores y Ganaderos y la Unión de federaciones Agrarias- señalaron inicialmente su disconformidad con la propuesta de la Administración y el mantenimiento de su postura de lograr incrementos de los precios de garantía iguales a los que la Administración decida para los costes de fuera del sector, costes energéticos y de, alimentación ganadera. Además solicitaban unas bandas de comercialización más elevadas de las que la Administración considera que se pueden dar a lo largo de 1985.