Londres estudia la propuesta argentina para normalizar las relaciones mutuas

El Gobierno británico estudia "con gran atención" la propuesta que ha realizado este fin de semana Argentina para la normalización de relaciones entre los dos países. Aunque tanto Londres como Buenos Aires mantienen un discreto silencio, parece que el Gobierno democrático de Raúl Alfonsín está dispuesto a aceptar los cuatro puntos ofrecidos hace dos semanas por el Reino Unido.Alfonsín exige que se añadan otros dos puntos, relacionados con la zona de exclusión marítima en torno a las Malvinas y a un eventual compromiso británico de paralizar sus planes de fortificación del archipiélago.

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El Gobierno británico estudia "con gran atención" la propuesta que ha realizado este fin de semana Argentina para la normalización de relaciones entre los dos países. Aunque tanto Londres como Buenos Aires mantienen un discreto silencio, parece que el Gobierno democrático de Raúl Alfonsín está dispuesto a aceptar los cuatro puntos ofrecidos hace dos semanas por el Reino Unido.Alfonsín exige que se añadan otros dos puntos, relacionados con la zona de exclusión marítima en torno a las Malvinas y a un eventual compromiso británico de paralizar sus planes de fortificación del archipiélago.

El primer movimiento para la normalización de relaciones, interrumpidas hace dos años por la guerra de las Malvinas, fue realizado por el Gobierno de Margaret Thatcher, que envió dos cartas secretas a Alfonsín: una cuando tomó posesión, expresando su deseo de establecer contactos, y otra con una propuesta concreta.

Londres propuso a Buenos Aires un plan de cuatro puntos: el retorno a Argentina de los soldados enterrados en el archipiélago, reiniciación de vuelos comerciales entre las dos capitales, restauración de vínculos comerciales y establecimiento de una comunicación directa entre la diplomacia de los dos países.

El objetivo de Thatcher era dar un primer paso que permitiera más tarde el restablecimiento de relaciones a nivel de embajador. Sin embargo, al mismo tiempo que realizaba esa oferta, la primera ministra volvió a dejar claro que Londres no aceptará ningún tipo de negociación sobre la soberanía del archipiélago, que seguirá siendo británico -dijo- mientras que sus habitantes lo deseen. La propuesta británica fue rechazada por el ministro argentino de Exteriores, Dante Caputo, no porque estuviera en desacuerdo con los cuatro puntos mencionados, sino porque le parecían insuficientes.

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