Un policía nacional, herido grave en Lasarte al estallar una bomba colocada bajo su coche

El policía nacional Anselmo González fue herido en la madrugada de ayer en un atentado en la localidad guipuzcoana de Lasarte. FA agente, a quien fue amputado un pie, continuaba ayer en grave estado. El herido, adscrito al acuartelamiento de Aldapeta, natural de Gijón, de 27 años de edad, casado y padre de dos hijos, se disponía a poner en mucha su vehículo cuando estalló un artefacto colocado bajo el automóvil. Anselmo González fue despedido por la onda expansiva a varios metros de distancia, mientras que los restos del coche quedaban diseminados en un amplio radio.

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El policía nacional Anselmo González fue herido en la madrugada de ayer en un atentado en la localidad guipuzcoana de Lasarte. FA agente, a quien fue amputado un pie, continuaba ayer en grave estado. El herido, adscrito al acuartelamiento de Aldapeta, natural de Gijón, de 27 años de edad, casado y padre de dos hijos, se disponía a poner en mucha su vehículo cuando estalló un artefacto colocado bajo el automóvil. Anselmo González fue despedido por la onda expansiva a varios metros de distancia, mientras que los restos del coche quedaban diseminados en un amplio radio.

Sometido a una intervención quirúrgica en el hospital de la Cruz Roja de San Sebastián, hubo de serie amputado el pie derecho. Sufre, además, fracturas en ambas extremidades inferiores, choque hipovolémico hemorrágico, hipoacustia bilateral y múltiples heridas y erosiones en todo el cuerpo.Poco después de producirse el atentado se presentaron en el hospital el gobernador civil y varios mandos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, así como los dirigentes del Partido Demócrata Popular en Guipúzcoa Gonzalo Urbistondo, diputado del Parlamento Vasco, y Gonzalo Quiroga, secretario provincial, a quienes el herido había prestado servicios como escolta en los últimos años.

A consecuencia de la explosión, en la que se emplearon dos kilogramos de Goma 2, resultaron también afectados tres comercios cercanos, el comedor de la empresa Michelín y las cristaleras de los edificios próximos.

Por otra parte, una explosión de gran potencia destruyó a primera hora de la mañana de ayer la sucursal del Banco de Bilbao en la localidad vizcaína de Las Arenas. Aunque no hubo daños personales -el guardia jurado había abandonado la oficina 55 minutos antes de producirse el suceso, una vez finalizado su turno de noche-, las pérdidas materiales podrían elevarse a unos 15 millones de pesetas.

Con el de ayer son 139 los atentados contra entidades bancarias producidos en el País Vasco en los últimos 18 meses, dentro de la campaña de ETA en relación con el cobro del llamado impuesto revolucionario.

En estos atentados han perecido siete personas, numerosas resultaron heridos, y los daños materiales superan los 700 millones de pesetas. La víspera, una bomba destruyó la sucursal del Banco de Santander en Durango (Vizcaya), cuya explosión fue anunciada por ETA Militar.