Los cinco grandes temas que dividen a los 'diez'

La negociación interna para la reforma de la CEE que se desencadenó en la cumbre europea de Stuttgart llega a su momento más crucial en la reunión que comienza hoy. Cinco son sus puntos fundamentales, pero es una negociación en paquete.

1. El aumento de los recursos financieros de la CEE: Es absolutamente necesario para el ingreso de España y para la propia Comunidad, cuyos fondos pueden quedar agotados, si no en 1984, sí en 1985 o 1986. Más de las dos terceras partes de los llamados recursos propios de la CEE provienen del, 1% del impuesto, sobre el valor añadido (IVA) de...

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La negociación interna para la reforma de la CEE que se desencadenó en la cumbre europea de Stuttgart llega a su momento más crucial en la reunión que comienza hoy. Cinco son sus puntos fundamentales, pero es una negociación en paquete.

1. El aumento de los recursos financieros de la CEE: Es absolutamente necesario para el ingreso de España y para la propia Comunidad, cuyos fondos pueden quedar agotados, si no en 1984, sí en 1985 o 1986. Más de las dos terceras partes de los llamados recursos propios de la CEE provienen del, 1% del impuesto, sobre el valor añadido (IVA) de los países miembros. En Atenas se trata de decidir el aumento de este 1% a 1,4% o 1,8% o cualquier cifra intermedia. Sólo la RFA no ha admitido el principio de que haya que aumentar los recursos. En caso de decisión sobre este tema, habría de ser ratificada por los parlamentos nacionales, pues supone un cambio de tratado. Va ligado a la demanda de una mayor disciplina presupuestaria.

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2. La reforma de la política agrícola comunitaria (PAC): El gasto agrícola se lleva un 70% del presupuesto de la Comunidad y ha aumentado en un tercio este año. Por ello algunos países exigen que se controle y que disminuya la producción de excedentes. Pero sin tocar a los ingresos de los agricultores. Difícil. Las propuestas que están sobre la mesa son unas cuotas de producción de leche e incluso de penalización de la superproducción, la instauración de una tasa sobre las materias grasas. En cuanto a política comercial, se propone acercar los precios de los cereales de la CEE a los del mercado mundial y Francia quiere discutir la cuestión del comercio agrícola con EE UU. Francia tiene un litigio con la RFA: el de los montantes compensatorios monetarios.

3. El problema de la contribución británica: Una vez más, como pasó en Stuttgart, Margaret Thatcher puede hacer girar en torno a su problema esta cumbre. Londres considera excesiva su contribución neta al presupuesto de la Comunidad y quiere que se llegue a un sistema de corrección permanente de este desequilibrio en vez de tener que ir a amenazantes negociaciones año tras año. Si hay una aceptación generalizada de este problema y de la necesidad de resolverlo, las posturas están aún sumamente enfrentadas en cuando a la modalidad.

4. Las nuevas políticas: Las discusiones sobre una política comunitaria en el campo de las tecnologías de punta o la creación de un espacio industrial europeo son las que menos problemas plantean, aunque no hay acuerdo sobre su dotación presupuestaria. Hasta ahora las discusiones han sido sobre todo de buenas intenciones.

5. Los fondos estructurales: Hay consenso sobre las ideas generales, pero no sobre su concretización, como, por ejemplo, el doblar la dotación hasta 1990 del fondo regional y del fondo social. Los países afectados quieren además una decisión sobre los llamados programas integrados mediterráneos para ayudar a las regiones más desfavorecidas.

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