El artículo de Alfonso Sastre

Hay ocasiones en las cuales me enfrento ante artículos tan elocuentes como el del estimado Alfonso Sastre. Me refiero a Más luz, publicado en este diario el domingo 13 de noviembre. Cuando lo leía me venían a la memoria las imágenes que yo tenía recogidas sobre su personalidad política e intelectual, imágenes impregnadas en mi mente a consecuencia de las múltiples visitas esta a mi casa; pero todas se iban derrumbando porque ha cambiado demasiado o, peor aún, no ha sabido evolucionar en sus pensamientos: ese proyecto revolucionario que predicaba Lenin, el pueblo español lo ha realizado ...

Hay ocasiones en las cuales me enfrento ante artículos tan elocuentes como el del estimado Alfonso Sastre. Me refiero a Más luz, publicado en este diario el domingo 13 de noviembre. Cuando lo leía me venían a la memoria las imágenes que yo tenía recogidas sobre su personalidad política e intelectual, imágenes impregnadas en mi mente a consecuencia de las múltiples visitas esta a mi casa; pero todas se iban derrumbando porque ha cambiado demasiado o, peor aún, no ha sabido evolucionar en sus pensamientos: ese proyecto revolucionario que predicaba Lenin, el pueblo español lo ha realizado de una manera diferente y mucho más eficaz; todo ha cambiado, ya nada es igual.Como cavernícola matritense, como así nos llama, no puedo aceptar su versión de las medidas antiterroristas; y, desde luego, no puedo compartir su afirmación de que la cuestión vasca es un problema teórico. Ahora ya ha dejado de ser un problema político, por mucho que le pese; no tienen cuestiones políticas suficientes para esgrimir ante esta sociedad española que les considera como unos meros asesinos; también se podrían citar múltiples manifestaciones contrarias a esa de Herri Batasuna que menciona. Desde ya, la equivocación es que se cree aún en una cuestión vasca, cuando la realidad es que es una cuestión entre un grupo reducido de dementes, asesinos y el resto de la sociedad, que día a día les va relegando a mentes marchitas como las de esos intelectuales que reivindica.

El genocidio del pueblo vasco nunca se producirá porque el verdadero, el auténtico pueblo vasco está con la Constitución y las demás leyes legalmente establecidas; y desde luego que al pueblo español no le pagan por defender su libertad, pero está muy claro que a otros les pagan por todo lo contrario. /